El PAN en su laberinto

Unos y otros panistas se han dicho, hecho y acusado de todo, no han escatimado métodos para descalificarse mientras las galerías confirman con azoro que el poder los hace iguales.

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Gracias por ser mi compañera de viaje en esta fascinante travesía. Florestán

El pasado 30 de noviembre, la falta de quórum reventó la sesión del Consejo Nacional del PAN que iba a aprobar el reglamento de su Comité Ejecutivo y designar a la comisión de notables que organizaría su proceso interno.

De entonces a la fecha, se ha endurecido la lucha por la dirigencia nacional del PAN, teniendo en una esquina a Gustavo Madero, que va por la reelección, y en la otra al senador Ernesto Cordero, a quien se ha identificado como el candidato de los calderonistas.

Debo apuntar que su relación nunca había sido buena, pero entró en un deterioro irreversible en el momento en que Cordero, coordinador de su bancada en el Senado, ya con Enrique Peña Nieto en Los Pinos y Madero sentado en la mesa del Pacto, se asumió como la auténtica oposición a él y al gobierno.

La ruptura llegó a la calle de forma clara, abierta y cotidiana. Había dos panes: el de Madero, con la bancada de los diputados, y el de Cordero, con una mayoría de sus senadores. Aquél, en uso de sus facultades como presidente del partido, relevó a éste de la coordinación senatorial y designó a un incondicional, Jorge Luis Preciado, descarnándose la guerra interna.

De entonces a la fecha, unos y otros se han dicho, hecho y acusado de todo, no han escatimado métodos para descalificarse mientras las galerías confirman con azoro que el poder los hace iguales.

Así, agraviados, enfrentados, divididos, intentarán mañana reanudar el Consejo Nacional reventado el año pasado, a fin de echar a andar, ahora sí, el proceso de sucesión, y si se les ocurre, el de cirugía reconstructiva, que tanta falta le hace al PAN.

retales

1. Frente. René Bejarano selló su alianza con Jesús Valencia, delegado en Iztapalapa, la más poblada del Distrito Federal, en una reunión a la que asistió la diputada federal Aleida Alavez, que perdió la delegación ante Valencia, y Agustín González, del Frente Popular Francisco Villa. Así se llevan, todos contra Mancera;

2. COmisionado. El presidente Peña Nieto movió piezas al designar a Alfredo Castillo al frente de la nueva comisión para la seguridad y el desarrollo de Michoacán. Castillo fue su subprocurador y procurador en el Estado de México y aquí, segundo de la PGR, con Jesús Murillo, titular de la Profeco, a la crisis de Humberto Benítez y ahora coadjutor en Michoacán. Es un bombero de crisis. En la PGR llevó la explosión de la Torre de Pemex y estaba en el cargo cuando la detención de Elba Esther Gordillo; y

3. Chano. En Monterrey, la Asociación Política Alfonso Martínez Domínguez hizo un reconocimiento a la trayectoria del político tamaulipeco Feliciano Guerra Aradillas, muy cercano al ex regente del DF y ex gobernador de Nuevo León. 

Nos vemos el martes, pero en privado.

Lo más leído

skeleton





skeleton