Por más que algunos seguidores mexicanos dieron la nota con sus excesos (broncas, robos, tocamientos indebidos), es un hecho que Brasil va a extrañar a los aficionados tricolores porque son de los que más gastan en eventos de este tipo.

Según un reporte de Visa, los que más han gastado en Brasil 2014 con sus tarjetas afiliadas a este medio de pago son los estadunidenses. En lo que va del Mundial han dado tarjetazos por 48.3 mdd. A ellos les siguen los ingleses, que han gastado con esta marca unos 16 mdd, mientras que los franceses facturaron 10.2 mdd, igual que los mexicanos.

Este reporte toma en cuenta “gastos de turistas internacionales en cuentas de Visa” del 12 (apertura del Mundial) al 28 de junio. Incluye tarjetas de crédito, débito y prepagadas.

Lo curioso del asunto es que en el Top 10 de los países de origen más gastadores, solo Francia, Argentina (quinto), Colombia (sexto) y Alemania (séptimo) siguen entre las ocho mejores selecciones que disputarán los cuartos de final. Otro dato es que en este ranking, los turistas de Angola figuran en la novena posición, superando a los de Chile, Canadá o España.

En total, la derrama vía Visa dejada en Brasil es de unos 188 mdd, según el reporte. Con dos semanas más a registrar, seguramente se llegará a un número superior a los 300 mdd.

Esto sería una parte de la derrama que se calcula por la organización del Mundial, tomando en cuenta que Visa es solo uno de los servicios y que mucha gente paga en efectivo.

Según Deloitte, la Copa del Mundo tendrá un impacto en la economía brasileña de 63 mil mdd y se contabiliza desde 2010 hasta finales de 2014. Equivale, dice la consultora, a 2.17% del PIB brasileño. Sin embargo, la inmensa mayoría de esos recursos derivan de aumentos en la producción nacional de bienes y servicios y apenas 2 mil mdd por gastos derivados del turismo.

También vale la pena mirar lo que la Fundación Getulio Vargas recién informó: la menor cantidad de días laborales útiles, por obra y gracia de la Copa, tendrá un “impacto considerable en la actividad industrial”.

La eliminación de México (como de Inglaterra y EU), seguramente no dejó contentos a los empresarios turísticos brasileños.