¡En México pagamos por ahorrar en los bancos!
El tener como objetivo “ahorrar” en cuentas de depósito o de ahorro que ofrece la banca en México, puede ser sólo una buena intención, ya que la mayoría de las cuentas que promueven las instituciones ofrecen una Ganancia Anual Total (GAT) negativa...
El tener como objetivo “ahorrar” en cuentas de depósito o de ahorro que ofrece la banca en México, puede ser sólo una buena intención, ya que la mayoría de las cuentas que promueven las instituciones ofrecen una Ganancia Anual Total (GAT) negativa, en términos reales, por lo que los recursos pierden poder adquisitivo.
Esta situación corresponde a la baja en las tasas de interés internacionales, en México existen alrededor de 88 millones de cuentas de captación tradicionales, cuentas de depósito o de ahorro en donde se pueden realizar diversas operaciones al contar con medios de disposición como son chequera y tarjeta de débito. Todas tienen en común una GAT que en lugar de ofrecer un rendimiento por el dinero depositado, la persona pierde en términos reales.
Alrededor del 70% de las cuentas transaccionales tradicionales se concentran en cuatro de los principales bancos, BBVA Bancomer, Banamex, Banorte y Santander. El indicador de Ganancia Anual Total fue introducido en 2010 por la Ley para la Transparencia y Ordenamiento de los Servicios Financieros, y en la reforma financiera del 2014 se amplió la obligación a más intermediarios y se adicionó el cálculo de la GAT en términos reales.
Para el Banco de México, dado que el nivel de las tasas de interés y otros elementos de los productos son determinados libremente por cada entidad, es relevante para el ahorrador comparar el rendimiento que ofrecen los intermediarios con la inflación, para procurar que los recursos invertidos mantengan su poder adquisitivo en el tiempo.
Los economistas llaman al resultado de dicha comparación “rendimiento en términos reales”. A un año de estar vigente la GAT real, los informes de los principales bancos muestran cifras negativas, lo que significa que el rendimiento total de una inversión o ahorro no compensa el efecto del aumento generalizado esperado en los precios, es decir, al invertir en dicho producto específico los recursos pierden poder adquisitivo.
Miguel González, coordinador del Centro de Estudios Financieros y de Finanzas Públicas, de la Facultad de Economía de la UNAM, indicó que los bancos no han podido abordar eficientemente el ahorro popular. “Por motivos de regulación, costos, riesgos y constitución de reservas, han preferido ofrecer fondos de inversión, que generan rendimientos positivos, pero no garantizan una tasa determinada y el riesgo lo absorbe el inversionista en lugar el banco”.
Indicó que faltan esquemas de fomento al ahorro con tasas y consideraciones fiscales atractivas, en lugar de que se ofrezcan productos como electrodomésticos, balones o playeras deportivas.
Juan Carlos Pelayo, director de Allianz Fóndika, dijo ante las tasas reales negativas los ahorradores deben buscar otras alternativas para guardar su dinero. “Hay que entender el negocio de los bancos. Su ganancia se deriva de la diferencia entre la tasa de interés que cobra a los deudores y la que paga a los ahorradores, y el banquero para ganar más prefiere bajar la tasa que paga, sin embargo, la gente no se da cuenta de esto”.
Información en los portales de los principales bancos del país muestran que en el caso de BBVA Bancomer de 13 productos en donde se informa el GAT Real, en 11 de ellos, es negativo. En el caso de Banamex, de 12 productos en donde informan este indicador en 11 se tiene una pérdida al ser negativo. Sólo en el pagaré a un año, desde 25 mil pesos, ofrece un GAT real positivo de 0.06%. Instituciones más pequeñas como Bankaool, ofrecen rendimientos positivos a partir de mil pesos y a plazos de siete días.