Epígrafes literarios
Revivir, de Miguel Bertrán Quera, en realidad no es un libro para leer, sino más bien para pensar y conversar.
En el año de 1980 una amiga me regaló este libro, Revivir, escrito por Miguel Bertrán Quera, editado por Herder, e impreso en Barcelona.
El libro comienza con dos páginas que llevan por título la palabra Amigo; y a las que sigue un Prólogo a la cuarta edición; en estas breves páginas primeras el autor agradece las cartas que ha recibido de sus lectores, y recomienda que el texto pase de mano en mano entre amigos.
El autor nos dice que su libro está pensado para cada uno de sus lectores, pero que en realidad no es un libro para leer, sino más bien para pensar y conversar.
La obra tiene un Índice general, un Índice de pensamientos, un índice analítico por materias, y un listado de los libros del autor.
El libro, de unas trescientas cincuenta páginas, tiene un total de doce capítulos, cada uno de los cuales inicia con un epígrafe.
Desde mi punto de vista, los epígrafes son la síntesis de lo que el autor ha querido plasmar en su escrito, son guiños que el autor nos hace a los lectores, pequeñas pistas que va dejando sobre sí mismo y su escritura.
Hoy, te invito pues a leer epígrafes.
“El amor es una fuerza que está en nosotros, para tirar de nosotros hacia fuera”: Bossuet.
“La alegría es el sol de las almas; ilumina a quien la posee y reanima a cuantos reciben sus rayos”: San Pablo de la Cruz.
No el mucho saber harta y satisface el alma, sino el sentir y gustar de las cosas internamente”: San Ignacio de Loyola.
“La verdad es la realidad de las cosas”: Balmes.
“La juventud no es un período de la vida, es un estado de espíritu, un efecto de la voluntad”: Mac Arthur.
“Se vive desde el porvenir”: Ortega y Gasset.
“Nuestras vidas son la obra de nuestros pensamientos”: Marco Aurelio.
“Hay derrotas que valen victorias”: Foch.