Es realmente preocupante revisar la sección de seguridad de la prensa escrita, ya que todos los días aparecen accidentes viales en los cuales todo tipo de vehículos de cuatro o más ruedas acaban volteados, situaciones que generalmente se producen al salirse de la cinta asfáltica, justo después de haber perdido el control por la falta de condicionamiento y haber sumado el volantazo a un frenazo inadecuado, maniobra que hace perder la condición de estabilidad al vehículo.

Además del mal manejo, existen ciertas características que determinan si un vehículo puede volcarse fácilmente o no y que son principalmente su centro de gravedad y el ancho del mismo. Los vehículos que tienen su centro de gravedad elevado, como las camionetas, tienen mayor probabilidad de volcarse, así como los vehículos que son muy angostos; y pareciera que sus conductores no están enterados de estas condicionantes.

Más allá de las características del vehículo, la forma de manejo y la prudencia del conductor determinan la probabilidad de volcarse. Todo conductor debe saber y tener presentes las condicionantes que pueden producir la pérdida de control y la volcadura; en muchos casos, tal vez la mayoría, ante una situación imprevista, el conductor corrige bruscamente el rumbo del vehículo, como una reacción de pánico ante una emergencia, como salirse del pavimento o que se atraviese un animal o un coche; si se maneja a velocidades altas, como casi siempre, el volantazo provoca que se pierda el control, se derrape y se vuelque. Nunca se debe reaccionar de esta manera: volantazo + frenazo = volcadura. 

Un punto vital es estar mentalmente condicionado para evitar correcciones de pánico, manteniendo las llantas en buenas condiciones, sin desgaste, a buena presión, respetando siempre las velocidades máximas y los límites de carga o de pasajeros, procurando siempre evitar portaequipajes en los techos, ya que modifican el centro de gravedad y su estabilidad.

Finalmente, antes que nada, si se va a manejar, es muy importante que su estado físico sea saludable, nunca se debe manejar tomado, cansado, con sueño o si se está bajo la influencia de algún medicamento; esto es, los 5 sentidos siempre deben estar al 100% cuando se va al volante.