Estructura de la casa de paja

Construir una casa de paja demanda un saber especializado, tanto del trazo del armazón como de los recursos botánicos.

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Con excepción de la base oval –plataforma baja de piedras que sirve de aislante contra la humedad– toda la casa se hace con material perecedero. Además del pak’lu’um o argamasa de k’ankab (tierra roja) y zacate para cubrir las paredes hechas de bajareque o kolóoj-che’, se emplean trenzas horizontales de bejucos o jalab-che’ con los que se afirma el bajareque.

A los cuatro horcones centrales se le llama noj-okom, son troncos de 20 cm de diámetro, necesarios para soportar la estructura de la vivienda. Estos horcones se complementan con otras horquillas conocidas como okom-mooy que van en el borde o pretil. Para recibir el techo o jo’ol-naj (lit. “cabeza o cobijo de casa”) se colocan sobre los horcones, unos largueros conocidos como paach-naj

El techo es una compleja armadura de vigas y maderos de árboles de probado aguante y resistencia a plagas y condiciones climáticas. Al caballete central, colocado horizontalmente en la parte superior del techo, se le conoce como jo’olnajche’

Los travesaños o crucetas (táanche’ o baalo) son los palos gruesos frontales que se ponen entre los horcones centrales y el caballete para hacerla rígida. A los largueros intermedios de la casa se les conoce como beel-ch’o’ (Lit. “camino del ratón”). 

El armazón conocido como winkil-che’ son los travesaños largos colocados verticalmente que forman las costillas de la casa, sobre los cuales atraviesan otros palos delgados. Sobre esta estructura se hace un emparrillado horizontal con varillas conocidas como jíil, donde se colocan o montan las palmas de huano (xa’an) o zacate (k’oxolak’).

Para formar el piso, primero se hace el firme o base de mampostería con saskab o tierra blanca apisonada. A este acto de allanar la tierra se le conoce en maya como bajpéek. A los rincones elípticos de las casas de paja se le llama mooy, que es generalmente donde va el altar casero.

Construir una casa de paja demanda un saber especializado, tanto del trazo del armazón como de los recursos botánicos. 

Una de tamaño estándar lleva 32 horcones, 600 palos para el bajareque, 62 varillas para sujetar, 4 crucetas, 2 largueros intermedios, 4 balos o vigas, 200 largueros (pach-naj), 1 caballete (joonaj-che’) y para amarrar se usa el suficiente áanikab –bejuco de la familia de las Bignoniáceas-. Para cobijarla se requieren cerca de 400 palmas de guano. Una casa bien construida y con el debido mantenimiento puede durar entre 40 y 50 años.

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