Fiebre de impugnaciones
La tercia de magistrados del Tribunal Electoral de Quintana Roo (Teqroo) por fin está desquitando su jugoso sueldo...
La tercia de magistrados del Tribunal Electoral de Quintana Roo (Teqroo) por fin está desquitando su jugoso sueldo, al atender un alud de impugnaciones interpuestas por los partidos políticos que en el fragor de la contienda presentan recursos hasta porque un militante del partido de enfrente los miró feo.
De entrada, en esta semana los magistrados dirigidos por el cozumeleño Víctor Vivas Vivas tendrán que resolver las ridículas impugnaciones interpuestas por las dos coaliciones que compiten en el estado, utilizando absurdos legales para intentar descarrilar a sus adversarios.
Y es que la semana pasada el PRI a través de su representante local, Juan Manzanilla Lagos, impuso un recurso en contra de la alianza PAN-PRD por supuestas inconsistencias en la conformación de la coalición. En respuesta el PAN hizo lo propio impugnando la alianza PRI-PVEM-Panal con los mismos argumentos sin sustento.
En el afán de hacerse daño están denunciando por tildes y comas, poniendo a trabajar al árbitro electoral que a regañadientes tiene que dar curso a todos los recursos, por intrascendentes que sean.
Es muy improbable que el Teqroo se arriesgue a comprometer la poca credibilidad que le queda con una resolución que perjudique tan sólo a la coalición retadora, por lo que seguramente darán trámite a las impugnaciones con un salomónico “nada para nadie”.
Lo que es evidente es que los partidos no escatimarán en tirarse piedras legales con este recurso tan mal utilizado, pero que se ha convertido en una de las armas electorales favoritas.
La guerra de impugnaciones apenas está empezando y amenaza con recrudecerse en cuanto se suban al ring los demás partidos -Morena, PT y Movimiento Ciudadano- que también querrán su cuota de protagonismo.
Los que se tienen que cuidar del daño colateral de este toma y daca legal son justamente los magistrados electorales, pues serán puestos a prueba por los partidos –principalmente de oposición para medir su imparcialidad, ya que han sido muy cuestionados desde su designación por sus lazos con el Tricolor.
El Teqroo tiene una pésima imagen ante la sociedad debido a la ineficiencia demostrada en procesos electorales previos, en los que la mayoría de sus resoluciones fueron aplastadas por los tribunales federales.
En este 2016 su actuación estará bajo la lupa, pero también tendrán una inmejorable oportunidad de lavarse la cara ante los partidos y la sociedad.