Después de un largo recorrido, la saga de Los juegos del hambre por fin concluye, con una cinta que de no ser por el trabajo de su protagonista, siempre talentosa y perfectamente enfocada en su papel, Jennifer Lawrence, sería poco menos que mala.

La película se vuelve pesada, con un argumento que raya en lo reiterativo y tedioso, situación que resulta normal, cuando  hablamos de extender una historia que ya había dado buenos momentos y muchos recursos a sus realizadores, encabezados por el cineasta Francis Lawrence.

Si bien en cierto que la saga juvenil ha dado mucho, también es importante cerrar ciclos para evitar un rotundo fracaso, que, por cierto, con Los juegos del hambre: Sinsajo-El Final, es un hecho que no sucederá, pues el nutrido público que ha dejado cautivo, película a película y libro a libro, seguramente llenará las salas donde se proyecte, que serán muchas en nuestro país. 

El 4 de noviembre de 2004, por primera ocasión, apareció en los medios de comunicación la columna “Cinematógrafo 04”, cargada de expectativas y esperando cumplir con un objetivo primordial: ofrecer al espectador cinematográfico una humilde opinión para que al asistir al cine tuviera un parámetro de elección.

La aventura comenzó en la extinta revista “Cultura D” y después emigró al diario “Pulso” de San Luis Potosí, donde por primera ocasión apareció el 19 de noviembre del mismo 2004, luego en el semanario “Notiarandas”, “El Heraldo de Saltillo”, “Diario de Chiapas”, etcétera, hasta encontrarse ahora en diversos periódicos y revistas, así como websites del país.

A 11 años de existencia, llegamos recargados de vitalidad y con el mismo entusiasmo que al principio, con el notorio agradecimiento a todos quienes han participado en y de este espacio del cine nacional e internacional, formando parte de todo.

Agradecido con editores, jefes de información, amigos y compañeros, actores, directores y gente de cine, que ha formado parte de este sitio lleno de ideas y mensajes cinematográficos, pero, sobre todo, con los lectores, que cada nos favorecen con su lectura y retroalimentación.

La imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, o sugerencias escríbame al correo electrónico [email protected].