“No va a ser fácil la negociación del TPP, las cláusulas están muy duras… pero creo que la Alianza Pacífico puede ser una plataforma alternativa de negocios”, dijo el secretario de Economía, Ildelfonso Guajardo, en un desayuno del International Women’s Forum de México.

TPP son las siglas en inglés del Acuerdo de Asociación Transpacífico, un bloque de 11 países que suma una tercera parte del comercio mundial. Quienes están negociando su participación en este club de exportaciones son Australia, Brunéi, Canadá, Chile, Estados Unidos, Malasia, Nueva Zelanda, Singapur, Vietnam, Perú y México.

Para nuestro país es una oportunidad para diversificarse a los otros 10 mercados ‘no estadunidenses’, ya que hoy por hoy 78% de las exportaciones mexicanas termina en EU. “Cada minuto que pasa, el comercio paralelo entre México y Estados Unidos equivale a 1 millón de dólares”, explicó Guajardo.

Y mientras parece que las negociaciones entre Washington y el resto de las economías del TPP no están siendo fáciles, la relación con los vecinos cercanos (Perú, Chile y Colombia), socios de la Alianza para el Pacífico, parece ir viento en popa. “Este bloque está despertando un gran interés global. Ya tenemos 20 países como observadores y ya manifestaron su real interés por sumarse Costa Rica, Panamá y Canadá”, dijo el secretario.

A Guajardo le entusiasman las ideas de la integración bursátil de este bloque de países que miran al Pacífico y afirmó que es muy positivo el desarrollo, la coordinación y la apertura que han logrado en poco tiempo versus el bloque que mira al Atlántico, el Mercosur.

A tal punto le tienen fe a la Alianza del Pacífico tanto Guajardo como el resto de la administración federal, que el propio presidente Enrique Peña Nieto habría sugerido renegociar y modernizar el Tratado de Libre Comercio (TLC) con la que tiene México con la Unión Europea, no solos sino, en bloque, con el resto de sus compañeros de la Alianza Pacífico.

“Eso daría una imagen muy positiva de grupo hacia el resto del mundo”, agregó. Y también (aunque no lo dijo) sería un guantazo blanco a la administración de Barack Obama que está negociando su TLC con la Unión Europea en solitario, sin llevar a la mesa a sus dos socios más fuertes como son México y Canadá.