¿Qué te gustaría, qué les gustaría que anunciara el secretario de Gobernación? Eduardo Cantú Elías responde de inmediato: “Acciones contundentes”.

Eduardo es el presidente de la agrupación Tamaulipas por la Paz, una de las promotoras de la marcha contra la inseguridad, el domingo en Tampico, que consiguió que los medios y sitios nacionales voltearan, vieran y escucharan el dolor de los tamaulipecos.

Dolor que está por cumplir una década, si se toma como punto de partida el envío de policías federales a Nuevo Laredo en junio de 2005. Una tragedia. En Nuevo Laredo, San Fernando, Reynosa, Matamoros, Río Bravo, Tampico, Altamira, Ciudad Mier…

Y no solo por las cifras y las espantosas imágenes de guerra, sino, sobre todo, por la forma en que los habitantes han ido sucumbiendo ante los criminales: en secuestros y extorsiones, en las carreteras, escuelas, comercios, calles. Han sufrido el miedo por más de 3 mil días. Más de 3 millones de habitantes, más de 3 mil días.

El infierno mexicano de la violencia y la inseguridad tiene graduaciones, diversos círculos. Tamaulipas debe ser el más cercano al fuego del tormento.

El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, estará hoy en Reynosa. Se espera que haga un anuncio fuerte, quizá las acciones contundentes que anhelan Cantú Elías y millones de buenas personas.

“Que se pongan a trabajar, por favor, a hacer la tarea, a hacer las cosas bien”, concluye Cantú Elías. “La Federación tiene que poner un orden y un plan estratégico. Ya hay casos de éxito así en nuestro país”.

Es hora de extinguir el infierno de Tamaulipas. Ya basta.