Cómo aprender a manejar (y 5)

El claxon debe ser un medio de alertar a otros conductores y no para agredirlos.

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Este último capítulo es el más difícil de digerir, pues está enfocado a lograr que prevalezca la cortesía al conducir; no podemos perder conciencia de que otras personas están compartiendo la vía o el camino con nosotros y que cada uno tiene su propio cronograma y debemos siempre procurar hacer que la conducción de todos sea más fácil, menos riesgosa: si todos hacemos esto, todos seremos los beneficiarios.

Por ejemplo, en el caso del claxon, cosa que ya hemos mencionado, éste debe ser un medio de alertar a otros conductores y no para agredirlos. El claxon es un dispositivo molesto; se debe utilizar, por ejemplo, cuando alguien se incorpora a la vía sin verte o cuando el semáforo está en verde y los conductores están soñando despiertos. Nunca utilices el claxon cuando te encuentres en un embotellamiento, del que desconoces sus causas.

Cuando alguien dé respuesta a tus solicitudes y te ceda el paso, cosa muy rara en nuestra ciudad, mueve la mano en agradecimiento; si un conductor te permite entrar en su carril delante de él, agita la mano para agradecérselo; estas actitudes no requieren de esfuerzo alguno y permiten hacer del espacio vial un espacio de convivencia. Sin embargo, es muy importante no desobedecer las normas de circulación sólo para parecer ser cortés, como cuando no tienes alto y te detienes para dejar que los que sí lo tienen pasen antes que tú.

Sin duda la conducción es una actividad riesgosa; sin embrago, si todos tuviésemos a flor de piel todas las normas que hay que aplicar y respetar, la conducción se convertiría poco a poco en lo que fue en el pasado: una actividad divertida, pero nunca debemos olvidar que el espacio vial no tiene otro dueño mas que todos quienes lo utilizamos. 

El tránsito pesado, las glorietas, las curvas y las pendientes son elementos que debemos tener perfectamente entendidos y definidas nuestras formas de conducir, que deben procurar, dadas las circunstancias, económicas y ambientales, para consumir menos combustible.

Ya para terminar, observemos hoy día, que debería de ser de convivencia, paz y armonía, cuáles son las condiciones del tráfico en nuestra ciudad y el comportamiento de quienes comparten este espacio con nosotros. 

Feliz Navidad.

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