La autoridad más cercana es la alcaldía, la vemos en las calles por los baches, en el alumbrado público, en la seguridad, en el arreglo de los parques, etc. La función primaria de los alcaldes es la de los servicios públicos. No existe desarrollo social sin desarrollo económico y casi todas las alcaldías tienen una dirección de promoción económica. Sus acciones son limitadas por falta de presupuesto  pero hay áreas de oportunidad que pueden ser menos costosas y con más impacto en la vida económica de Mérida sobre todo a largo plazo.

El presupuesto de la dirección económica del municipio es limitado: 48 millones de un total de 2,300 millones. La inversión que más ocupa recursos  del municipio es  construcción de calles, parques y servicios municipales; la tarea de desarrollo económico está dedicada a la promoción de la inversión privada entre empresarios de fuera y a préstamos a mini pymes. Una estrategia muy cosmética, poco eficaz.

¿Cuál ha sido el resultado? El de dos Meridas. La del norte desarrollado y símbolo de la presencia de todas las franquicias importantes del mundo, y la de sur, donde dominan las tiendas pequeñas y servicios artesanales de los cuales muchas familias dependen y que están amenazados con la invasión de tiendas con descuentos fuertes y crédito.

Los gobiernos municipales pueden ser generadores de empleo con sólo tener una visión real de la naturaleza de los negocios que hay en la ciudad, del destino de los recursos de su presupuesto y de la inclusión de empresarios  como generadores de capital y riqueza.

Propongo algunas medidas no costosas pero sí de impacto directo en la generación y conservación de riqueza local.

Pagar a tiempo.- Los gobiernos puede ser generadores de empleo, pero también destructores, muchas empresas locales no tienen capacidad económica para aguantar largos periodos de tiempo sin el pago de sus ventas a gobierno; tener un plazo adecuado y  la certeza de pago hará un gobierno incluyente con las pymes locales.

Empresas locales.- Los primeros generadores de empleo son los empresarios locales que parecen una especie en extinción; reconocer su valía, darles preferencia si cumplen en calidad y precio no sólo es socialmente responsable sino que debería ser una política pública.

Uso de suelo.- Sugiero prohibir o limitar las tiendas de autoservicio trasnacionales o  de “conveniencia” de mega empresas en el  sur de Mérida. Las mipymes no tienen las condiciones financieras para competir.