Hace unas semanas un amigo me decía sorprendido que cómo es posible que no haya un orden en el manejo de carga en la ciudad, ya que, me comentó, había visto circulando por Circuito Colonias un trailer de doble caja, enorme, me dijo, que ocupaba más de un carril y alentaba el tránsito vehicular por sus problemas al querer dar vuelta.

Me comentó en días pasados, cuando conversamos de nuevo, que se había dedicado a fijarse en los camiones y traileres de carga que circulan a todas horas por nuestras calles con un importante valor histórico; me dijo que vio enormes traileres llevando maquinaria de construcción, muchos traileres, incluso con contenedores provenientes del Puerto de Altura; yo hice lo mismo y es realmente agresivo y de alto riesgo que esos enormes camiones de carga estén circulando por la ciudad como si fueran simples automóviles.

La logística urbana es un concepto que se está aplicando con éxito en muchas ciudades de nuestro país, que abarca un conjunto de problemáticas, entre las que destaca la distribución física de mercancías, que incluye todos los procesos en las cadenas de suministro, en particular el transporte terrestre, la gestión de inventarios, el procesamiento de los calendarios de pedidos, todo para asegurar un buen servicio al consumidor, sin afectar el buen funcionamiento del espacio vial de la ciudad. Un aspecto importante es la definición de los espacios comerciales en función de la conectividad vial.

En la logística de distribución física de mercancías, las tendencias globales que marcan la innovación de los procesos son, en las ciudades del primer mundo, la reducción de inventarios mediante un sistema de centros de distribución jerarquizados y estratégicamente ubicados, el desarrollo de innovadoras alternativas para el procesamiento de pedidos, el procesamiento de pedidos por lotes, el desarrollo de procesos y operaciones en logística inversa para satisfacer requerimientos de normas y políticas en materia de reciclado, y la innovación en la selección de vehículos adecuados para llevar las mercancías de los centros de distribución a los puntos de consumo.

Estas innovaciones logísticas son la clave para la competitividad de la ciudad, seamos todos vigilantes de su aplicación.