Otra vez las filas para ocupar lugar, comienzan, otra vez los ajetreos en la mañana cuando estamos a la mitad del ciclo escolar.

Otra vez a pasar malas noches, tomar una silla del hogar y encadenarla a las puertas de algún plantel, pasar desvelos y sufrir las inclemencias del tiempo. ¡Todo sea por los hijos¡

La Secretaría de Educación Estatal (SEE) insiste año tras año en que no son necesarias las filas. Pese a eso se hacen. La dependencia estatal se queja de que además no es sino hasta septiembre cuando se acercan los tutores que dejan todo para el último momento.

Hay nuevos directores de nivel educativo, desde preescolar hasta primaria y secundaria. Y desde el punto de vista político,  no interesa realmente a la sociedad, quien ocupe el cargo ahora. Lo que importa es que quien lo tenga le dé solución a los problemas de cada año.

Hay dos polos en crecimiento, y aunque poco a poco se ha visto satisfecha la demanda, la realidad es que la lucha entre papás de cada año es el “gana gana” por ver quién queda en la escuela de su preferencia, similar a los niveles superiores, sólo que sin examen, mejor aun, pagar una cuota económica según el prestigio de la escuela.