Hace unos meses llegó a mis manos, en calidad de préstamo, un libro, cuyo subtítulo declara que es una colección de cuentos, y especifica que son cuentos de parejas; el título está compuesto por tres palabras: Amantes y enemigos. La autora, Rosa Montero, lo publicó por vez primera en 1998, la edición que yo leo es del año 2007.

En la contraportada las palabras impresas nos dicen que se trata de una obra de narrativa, hecha para disfrutar y reflexionar; y al hacer un breve recuento de algunas de las temáticas que constituyen la obra, nos adelantan que los relatos giran en torno a la complejidad de las relaciones humanas.

El libro inicia con un apartado llamado Una pequeña explicación, en el cual Rosa nos deja saber que es una apasionada lectora de cuentos, pero no una asidua escritora de ellos; sin embargo, al correr de los años, ha ido reuniendo cortas narraciones, que en ocasiones han formado parte de algunas de sus novelas.

El orden cronológico de la escritura de los cuentos abarca desde 1981 hasta 1997; cuentos que han sido leídos en público, formado parte de antologías, y aparecido publicados en periódicos. Son un total de diecinueve relatos, de los cuales mencionaré una palabra de cada uno, intentando formar una frase, de modo que la suma de todas ellos pueda funcionar como una historia por sí sola: La vida de Paulo, hombre del lago, parece un viaje de plata; el alma en la garganta de mi amigo, cual noche de reyes, es otra gloria quemada, como un retrato ciego.

El préstamo del libro, ha permitido el préstamo de la lectura, y con algunas de sus palabras prestadas, he construido un breve relato, que nada tiene que ver con las narraciones escritas por Rosa Montero. Todas las palabras al fin de cuentas son prestadas, y su uso y reutilización las mantiene vivas; te las presto.