Leyes universales
Todo es mental. Somos un campo mental materializado, manifestado; no otra cosa.
Alguien me dijo que estas son Leyes universales:
1ª. MENTALISMO. Todo es mental- Somos un campo mental materializado, manifestado; no otra cosa.
2ª. CORRESPONDENCIA. A toda acción corresponde una reacción, una respuesta; nada queda perdido en el vacío o la nada, todo está entrelazado en una trama y se corresponde en todas direcciones.
3ª. VIBRACIÓN. Todo está en movimiento, vibrando a diferentes frecuencias que se corresponden mentalmente, armonizándose (a voluntad).
4ª. POLARIDAD. Los polos, o los extremos opuestos vibran en una frecuencia de correspondencia mental, idéntica; si prolongamos un polo, terminaremos tocando el polo opuesto. Podemos decir que odiar es una forma de amar.
5ª. RITMO. Es el tránsito de nuestras emociones de un estado a otro, experimentándonos, vibrando para corresponderse mentalmente. Es el movimiento pendular que, en su acontecer, manifiesta los patrones de ritmo en la vida: nuestro biorritmo personal individual y el biorritmo colectivo universal.
6ª. CAUSA-EFECTO. Todo efecto o manifestación mental corresponde a un rango de vibración que polariza en cierto ritmo con su causa; así, toda causa tiene del mismo modo un efecto.
7ª. GENERACIÓN. Los acontecimientos polares se atraen, coinciden en un ritmo de vibración correspondiente y crean como efecto de esa causa Así, en el universo, la creación sucede amorosa-mente, santa-mente, dentro de este marco maravillosamente ordenado.
El universo y su expresión manifestada en las leyes están al servicio del hombre, cuando el hombre se reconoce hijo del Creador y comprende que su libre albedrío se manifiesta puntual-mente dentro de este marco de perfección, de orden y que no es de otra manera, por que no la hay.
“Es tan importante la vibración, que a veces su silencio es más fuerte que el volumen de la voz, cuando nos hablan ciertas personas, a las que internamente nos oponemos a escuchar”.