Los indicadores económicos siguen de mal en peor. Los datos del INEGI arrojan que a agosto de 2013 las ventas en los comercios mayoristas bajaron 5.6%. A su vez, la tasa de desempleo en septiembre fue de 5.29% de la Población Económicamente Activa (la segunda más alta del año).

Lo alarmante es que por parte del Gobierno Federal no sólo no hay signos suficientes que motiven la reactivación económica sino que, por el contrario, con el apoyo de una mayoría de diputados federales de coalición PRI-PVEM-PRD nos han recetado alzas en precios de bienes públicos y en impuestos (IVA, ISR, IEPS).

Contrario a todo sentido común en una época de casi recesión, no se ha tenido empacho en aumentar gravámenes a las familias mexicanas y a la actividad económica. 

Todo sea en nombre de que al Gobierno del Distrito Federal (PRD) se le otorgue un pequeño y adicional fondo económico y que el Gobierno Federal  vea incrementado gigantescamente sus recursos de Gasto Público. Parece que esos diputados federales asumen la representación de sus Gobiernos más que la de los ciudadanos que los eligieron. No se prevé que los Senadores de esas formaciones políticas actúen diferente.

Por de pronto, en el terruño, bueno sería que los diputados federales yucatecos que votaron a favor (5 del PRI y 2 del PRD) nos explicaran las razones de su voto. Los yucatecos seguramente quisieran saber, sobre todo, por qué aprobaron que mes a mes durante el 2014 nos sigan aumentando el precio de los combustibles que no daña sólo a quienes tienen vehículos propios como se acaba de ver en el incremento de las tarifas de transporte público. ¿No que con la Reforma Energética -en vísperas de aprobación- iban a bajar los precios de los combustibles?.

Ojalá que los Organismos de la Sociedad Civil o Empresariales pronto citen a nuestros legisladores yucatecos para conocer sus explicaciones. Eso si son capaces de asistir.