Los maestros, los gobernadores y otros apuntes después del desalojo
Guerrero no es Oaxaca. Ni Michoacán ni Chiapas. Parece obvio, pero si uno lee los diarios y escucha las radios no parece claro.
1. A las dos de la tarde del miércoles, la hora en que el gobernador de Oaxaca me había citado para entrevista, de su despacho salió acompañado por, entre otros, el hoy diputado local Flavio Sosa. Sí, el mismo que en 2006 fuera fundador y vocero de la APPO, después arrestado y encarcelado en una prisión de alta seguridad para ser declarado no culpable un año y medio después.
Lo cuento solo por una razón y sin afán de hacer demasiadas lecturas: en política como en la vida, las cosas cambian.
2. Guerrero no es Oaxaca. Ni Michoacán ni Chiapas. Parece obvio, pero si uno lee los diarios y escucha las radios no parece claro. Aunque la CNTE anunció una estrategia común frente a la reforma constitucional en materia de educación evidentemente las tácticas han sido diferentes. Los siempre combativos michoacanos (que hoy gobierna el PRI) parecen dormidos. En Chiapas (que gobierna PRI-PVEM) no pasa nada. En Oaxaca (PRD-PAN-MC) se movilizaron en algunas regiones, se pusieron a negociar con el gobierno estatal, bloquearon parcialmente y a ciertas horas un par de centros comerciales en la capital. Y en Guerrero (PRD) se han movilizado, tomado oficinas públicas y bloqueando la importantísima Autopista del Sol en días fundamentales. Es decir: esta puede ser una coordinadora, pero parecen cuatro.
Dan ganas de hacerle al sospechosismo.
3. La reunión del jueves pasado del secretario de Gobernación con los gobernadores donde opera la CNTE llegó semanas tarde. ¿En serio nadie imaginó que la coordinadora reaccionaría después de la reforma y el arresto de Elba Esther Gordillo? ¿Por qué no fueron convocados los gobernadores que se reunieron el jueves desde el día del arresto? Los trajeron para aplaudir al Presidente después del arresto de la lideresa, pero no para armar una estrategia conjunta frente a la previsible reacción de los maestros disidentes del Sindicato.
4. En Guerrero algo ha salido muy mal. Sobran las versiones y faltan las certezas: que si el gobernador actuó tarde, que si hay una relación con lo sucedido en esa carretera hace meses, que si no se puede separar del surgimiento de los llamados “grupos de autodefensa”. Pero no parece que haya voluntad de incidir en la política pública ni de cejar en las provocaciones mediante los bloqueos. También es cierto que hasta ayer la Federación parecía haber dejado solo al gobernador Aguirre.
5.- “Tropicalizar”, como dijo el gobernador de Oaxaca, respecto a las evaluaciones a alumnos y maestros es una expresión más que desafortunada. Pero, sobre todo, porque en ninguna parte del acuerdo que había firmado con la Comisión Política de la Sección XXII de la SNTE dice algo parecido. Dice, por ejemplo: “Establecer la obligación de las autoridades educativas locales de realizar procesos de consulta con los diversos sectores sociales antes de proponer a la Secretaría los contenidos regionales que hayan de incluirse en los planes y programas de estudio;
Fijar que las autoridades educativas locales puedan participar en la definición de los criterios, términos y condiciones de evaluación que se efectúen para el ingreso, promoción, reconocimiento y permanencia en el servicio profesional docente; y,
Establecer que las autoridades educativas locales puedan participar en la elaboración y diseño de los componentes, procesos y resultados del sistema educativo y en la definición de los lineamientos que contengan los criterios de evaluación correspondientes”.
¿A alguien le parece una locura? La Asamblea de la XXII no aprobó el sábado el acuerdo, pero la Comisión Política se ha seguido reuniendo con el gobernador.
En Guerrero no ha existido un proceso similar de diálogo y, por lo que sabemos, fue el gobernador Aguirre y el Congreso quienes han incumplido una promesa.
6. La crisis del 2006 en Oaxaca comenzó con un enfrentamiento de maestros y policías, y terminó con muerte y caos. Siete años después la economía oaxaqueña apenas se recupera de aquello. El primer escarceo ha sido ganado por la Policía Federal con un operativo que parece —hasta el cierre de esta columna— limpio y efectivo. Pero el gobierno federal y los gobiernos estatales deben saber que esto apenas comienza. Sobre todo si los maestros de Oaxaca se activan y los de Michoacán aparecen después de su inédito letargo.
7. ¿Quién decide la estrategia ahora? El operativo policiaco de ayer fue estrictamente federal. ¿Se volverá a dejar en manos de los gobernadores la negociación política? ¿Tendrán herramientas suficientes?
8. El plan del Pacto por México es presentar la iniciativa de la nueva Ley General de Educación en los próximos días. Eso tensará las cosas con la coordinadora ¿Qué hará el Congreso federal? Momentos clave para el nuevo gobierno y el Pacto. Con muchos más matices y preguntas que los
que quieren reconocer aquellos que claman por la simple mano dura.
Twitter: @puigcarlos