Los monopolios son aquellas empresas cuyos productos o servicios dominan en su mercado, tienen varios disfraces: son proveedores únicos, son los únicos autorizados (monopolio por decreto) o muchas veces son dos empresas únicas, a éstas se les llama duopolio.

En la Península muchos años tuvimos barreras geográficas que fortalecieron empresas locales. La Wonder dominó Yucatán muchos años antes que viniera Bimbo, y Cerillera Palma antes que viniera Cerillera Nacional y muchos productos más, pero también en servicios: hace unos años los camiones de Mérida a Cancún costaban 120 pesos, de repente cancelaron varias empresas locales, y el boleto de la empresa dominante subió un 200%. 

Telmex, cuando se vendió, el monopolio subió sus tarifas un 100% y luego más. En resumen, se estima que en México, por los monopolios, pagamos un 20% más sobre productos y servicios que en el mundo son más baratos.

¿Pero por qué existen? La mayoría por la estructura de autorización de ciertos giros de negocio, que son permisionario o concesionario; si te concesiona el gobierno te lo puede quitar, entonces muchos inversionistas no se meten a esos giros; ejemplo bancos, cementeras, productos químicos  prefieren la forma de permisionario, que significa que, si cumples con cierta normatividad, puedes abrir tu negocio.

Siempre he pensado que los grandes supermercados globales involuntariamente generan monopolios mediante cadenas de proveedores, igual globales, exterminando al pequeño proveedor local por falta de plataforma de servicios transnacionales; ellos ya son monopolios de distribución y pienso que se les debe de regular igual, pero ese es otro tema.

En el caso del transporte, los camiones urbanos son permisionarios, pero no es así entre estados, ni en transporte marítimo; empresas nuevas que logran esas concesiones bajan los sobreprecios de monopolio a rentables. El Gobierno Federal ha sido impulsor de meter nuevas cementeras, bancos, empresas de telecomunicación, petroleras y empresas del transporte.

Los precios que bajan, sean en cemento, tarifas de celular  o transporte aéreo y marítimo, causan escozor a los dominantes del mercado, pero los monopolios son fallas legítimas del mercado que tienen que sanar en beneficio de la sociedad. Bienvenidas las nuevas empresas de transporte marítimo Cozumel-Playa, bienvenidos sean los nuevos camiones urbanos de Yucatán, bienvenidos las nuevas cementeras y nuevos bancos. En general, aplaudo la política federal de inclusión de empresas locales en sus propios mercados.