A Patricia Segovia le llama la atención lo que se ha vuelto recurrente en milenio.com:

A Ciro Gómez Leyva, Álvaro Cueva, Juan Ignacio Zavala y a usted los deberían declarar “prohibidos”, pues al parecer son adictivos.

Se les agrede y hasta insulta en muchos de los comentarios que aparecen abajo de sus respectivas columnas, pero lo curioso es que quienes lo hacen ¡son los mismos todos los días!
Eso sugiere que los escritos de ustedes les provocaron adicción y “les hacen daño” pero, como lo demuestran sus virulentos comentarios, no los pueden dejar de leer.

Son tan adictos algunos que además los ven en MILENIO Televisión, aunque se enojan igual según lo expresan.

A mí casi siempre “me gusta lo que hacen” y los periodistas que me molestan o hacen enojar por lo que publican o dicen prefiero, simplemente, no leerlos ni verlos.

Lo sano es lo que hace Patricia, pero a los “adictos” de que habla, monocordes y necesitados de comulgar con otros que “piensen” igualito que ellos, la libertad les provoca roña y no se atreven a ejercer la suya para optar.