¿Mánager o empresario?
Es una realidad y aceptamos el argumento de que al no haber empresarios, los mánagers tienen que tomar la estafeta...
Qué bueno que se está haciendo boxeo popular, pero no hagas cosas buenas que parezcan malas, porque es una realidad que no se puede tapar el sol con un dedo y antes de que el niño caiga al pozo es importante comentar que al no haber un organismo rector del boxeo profesional en municipios como Kanasín, pueden hacer y deshacer lo que se les venga en gana con los récords y peso de los pugilistas.
El alcalde de Kanasín desconoce el peligro que ronda en un ring cuando un combate es desigual, pues no puede ser posible que autoricen una pelea entre un boxeador de 12 riñas contra su rival de tan solo un combate.
Desconocemos qué comisión de boxeo se atrevió a sancionar dicha función porque como se recordará en Mérida le negaron permiso a René “Crucigrama” Medina, porque es entrenador y no puede ser juez y parte.
Fue una medida aplaudida porque tiene toda la razón el galeno Santiago Basto Mejía al tomar una decisión acertada, pero ahora en el municipio de Kanasín un manager es promotor y ¿quién le dio luz verde o le expidió su licencia de promotor o empresario?
Es una realidad y aceptamos el argumento de que al no haber empresarios, los mánagers tienen que tomar la estafeta pero no se deben cerrar negando sus pupilos a otras empresas locales o les piden cantidades exorbitantes para que no los contraten; en cambio, cuando son para sus veladas, les pagan con tortillas duras.
Oajalá que el buen amigo César “El Platanito” Arjona se haya regularizado porque hace como uno o más años, nos llegó la información de que teniendo como residencia a Mérida, contaba con licencia de Progreso él y sus pupilos, pero por investigaciones de la Comisión de Boxeo de Mérida, descubrieron que esos carnets no tenían validez oficial y hasta involucraron a una doctora que trabajaba para el DIF de la Fidel Velázquez, ya que expedía salidas o exámenes médicos a los pupilos de “El Platanito”.
Nos contó el presidente de la Comisión de Boxeo de Valladolid, Euberto Díaz, que en alguna ocasión el mencionado mentor le habló para solicitarle le expidiera licencias a él y sus pupilos y se lo negó.
En cuanto a lo deportivo, va nuestra felicitación pero sería prudente que nombre a un promotor que se haga cargo de las funciones y que Arjona se dedique a seguir formando nuevas figuras del pugilismo yucateco en su gimnasio.
Por cierto, fuimos enterados de que el empresario Mario Abraham Xacur regresará a las funciones de corte popular a través de “Max Boxing” y la acertada promoción de Jorge Puga.
Serán veladas con base a prospectos y con algunos consagrados que han tenido poca acción, lo más importante será que los pleitos estarán nivelados para no defraudar a la noble afición de Yucatán.