'Manos de Piedra' un homenaje al boxeo latino
En términos generales, el filme cumple con la labor de dotar a su personaje principal (interpretado por Edgar Ramírez) de una naturaleza plagada de credibilidad...
Hablar del boxeo profesional es indagar en la trayectoria de personajes de tal relevancia que han cambiado la forma de pensar de comunidades y algunos otros hasta de sus países de origen, tal es el caso de Roberto “Manos de Piedra” Durán, a quien se le recuerda perfectamente por sus grandes logros pugilísticos, pero del que no se puede separar el sentimiento de ignominia que dejó en sus seguidores.
Nacido en Panamá, el boxeador salió de la inmundicia para construir su imperio familiar y volverse de a poco, una suerte de héroe nacional al derrotar al míticoSugarRay Leonard en una batalla memorable, digna de cualquier crónica de suspenso desbordado.
Pero el retrato que nos presenta el cineasta venezolano Jonathan Jakubowicz en “Manos de Piedra”, va más allá de la parte bella y pulcra de la historia. El director caraqueño nos ofrece también la otra cara de la moneda, mostrando el declive del pugilista debido a su pésima reputación, al caer poco después de sus grandes logros deportivos en la miseria en su barrio natal.
En términos generales, el filme cumple con la labor de dotar a su personaje principal (interpretado por Edgar Ramírez) de una naturaleza plagada de credibilidad, en la que convergen el triunfador y el derrotado, el poderoso y rico con el pobretón y cabizbajo, pero su grave inconsistencia es que trata de abarcar muchos temas, quizá tratando de captar una biografía detallada del boxeador, situación que no permite al espectador detenerse en casi ningún aspecto, por lo vertiginoso de la narración.
Una película entretenida, aunque por momentos entra en un ritmo vertiginoso imposible de seguir.
Décimo segundo aniversario de Cinematógrafo 04
Luego de la incesante necesidad de escribir, de los gratos momentos y los buenos tiempos, de caminar paso a paso por la senda del periodismo cinematográfico, el pasado domingo se cumplieron 12 años de que esta columna viera la luz por primera ocasión en un medio de comunicación y hoy en día sigue vigente.
Con un simple agradecimiento no basta para corresponder a los lectores que amablemente siguen las humildes opiniones de su servidor, pero ojalá que sirva de algo. Espero seguir contar con el favor de su lectura mucho tiempo más.
Sólo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias escríbame al correo electrónico [email protected] o regístrese en www.facebook.com/CinematografoCeroCuatro/ para recibir más información del séptimo arte.