Una vez más los dos grupos al interior del PAN se enfrentaran para medir fuerzas, entiéndase en el que encabeza Eduardo Martínez Arcila, líder estatal del PAN,  y el de Alicia Ricalde, pero ahora será para pelear la dirigencia municipal de Othón P. Blanco.

En el caso del grupo de Alicia Ricalde Magaña, la cabeza visible es Mario Rivero Leal, por cuyo grupo contenderá por la dirigencia municipal Antonino Chi Yam, quien ya se registró como aspirante a dicho cargo.

El grupo de Eduardo Martínez Arcila, y el mismo dirigente estatal de ese partido, apoyará al regidor Fernando Zelaya, quien se prevé se registre como aspirante en las próximos días para participar en la elección a realizarse el 20 de julio próximo.

En su momento el regidor aseguró que la gran mayoría de los militantes ven con buenos ojos su participación para buscar la dirigencia municipal de ese organismo político, y habló de conformar una planilla en la que por lo menos el 50% sean mujeres.

Si bien el regidor Fernando Zelaya no es precisamente del mismo grupo del dirigente estatal del PAN y cuenta con su propio equipo, su estructura que lo respalda y el no permitir que el grupo de Mario Rivero tome el control de ese partido en la capital, los unió.

La alianza es coyuntural, se comenta en ese partido, y el dirigente estatal ofreció apoyar a Zelaya y éste aceptó para llegar a la dirigencia municipal del albiazul.

En el caso de la coordinación y preparación de la elección municipal, ha trascendido que estará en manos de la regidora Mayuli Martínez Simón, quien obviamente es del grupo de Martínez Arcila.

Se espera que el anuncio oficial se haga en los próximos días, sobre todo porque la regidora ya comenzó con el trabajo de preparación de la elección.

Ello no tiene nada contento al grupo contrario, el de Mario Rivero Leal, porque consideran que toda la elección se realizará a modo para favorecer al candidato de Martínez Arcila, que en este caso se entendería que es el regidor Fernando Zelaya, al aceptar el apoyo de la dirigencia estatal.

En otro tema de regidores, pero en este caso de la mayoría del cuerpo de Cabildo de Othón P. Blanco, ha trascendido que los concejales capitalinos ya pidieron mano para ocupar las nuevas oficinas del palacio municipal, esas que no concluyó la empresa Chivosa y que ahora están a punto de terminar las autoridades municipales.

Los regidores quieren mudarse a ese espacio y dejar el que ocupan en el tercer piso del palacio municipal, con el argumento que los cubículos que ahora tienen están para dar pena y no hay espacio suficiente.

La propuesta es construir cubículos parecidos a los que hay en las oficinas de regidores  del palacio municipal de Benito Juárez, pero obviamente mejor equipadas.

Pero la petición de mudarse a las oficinas construidas en el estacionamiento tiene otra lectura, y es que los regidores capitalinos buscan la forma de aislarse totalmente de los ciudadanos que acuden a solicitar algún apoyo económico.

En palacio municipal ha trascendido que, para ello, han pedido se coloque otra reja, la cual estaría ubicada cerca de las escaleras que conducen a la sala de Cabildos.

Con ello estarían totalmente aislados de los mortales que les dieron su voto en las elecciones de julio del 2013, dado que el acceso al estacionamiento ha sido sellado con tremendo portón que sólo se abre para el ingreso de los regidores  y el alcalde.

La petición ya está hecha por la mayoría de los regidores, quienes ahora no quieren ser molestados por el ciudadano que requiere de su ayuda, o por los habitantes de las comunidades que en contadas ocasiones acuden a pedir apoyo.

Y digo en contadas ocasiones porque las oficinas de los regidores casi nunca son visitadas por los ciudadanos, esto porque los concejales, o no se encuentran en sus cubículos, o porque no los reciben con el argumento de las dos secretarias que flanquean la entrada, quien aseguran que están en reuniones de trabajo.