'Micros' morados y nuestros gobiernos de ocurrencias
Como se nota que no tienen suficiente chamba, en el Gobierno del DF han ahora tenido la ocurrencia de cambiar el Hoy No Circula.
Si usted comienza a ver una película y sale un taxi amarillo, sí, de esas casi lanchas amarillas, o si mientras un personaje camina detrás de éste pasa un camión rojo de doble piso, o si un par de autos persiguiéndose chocan con un Mercedes que tiene una señal luminosa roja que dice Taxi, o si ve en la pantalla un auto blanco con una raya roja en diagonal, usted seguramente podrá adivinar que se trata de Nueva York, Londres, París o Madrid.
Algún día nuestra Ciudad de México tuvo algo similar: nuestros vochitos verdes convertidos en taxis. También intentamos hace muchos años tener ballenas y delfines, pero el fin de la Ruta 100 se lo llevó todo.
Ahora tenemos en las calles taxis de todos colores y sabores, quedan por ahí algunos verdes, pero también hay de ese color vino (candy, es su nombre oficial) con dorado, aunque algunos de sitio son blanco con rojo y en el aeropuerto hay un popurrí.
Los micros son casi todos verdes, lo cual comenzaba a tener demasiado sentido para el gobierno, por lo que ha decidido que ahora los pondrá de morado con blanco.
¿Por qué? Pues, porque pueden.
Es más sencillo cambiarlos de color que regularlos. Más fácil vestirlos color Barney que aplicarles la ley, aunque sea el reglamento de tránsito. De color morado, pero seguirán siendo los causantes de accidentes y tráfico y el miedo de los capitalinos.
Como se nota que no tienen suficiente chamba, en el Gobierno del DF han ahora tenido la ocurrencia de cambiar el Hoy No Circula. ¿Por qué? Pues, porque pueden.
Y porque, según explican, quieren que dejen de circular unos 170 mil autos además de los más de 300 mil que dejan de circular ahora.
¿Cómo se transportarán ahora quienes ya no puedan circular? Pues quién sabe, que se las arreglen, porque no habrá ni más ni mejor transporte público. Solo será de un nuevo color.
Eso sí: todo el transporte público deberá tener el lema “decidiendo juntos”, lo cual no deja de ser curioso, porque no parece que esa decisión se haya tomado entre demasiados.
Lo del morado me parece de mal gusto, pero eso es mi muy particular afición por otros colores; tampoco me preocupa demasiado, en unos pocos añitos ya vendrá otro jefe de Gobierno que tendrá otras ocurrencias y otros colores y otras reglas… Así vivimos.
Twitter: @puigcarlos