Una de las características que tienen las empresas y marcas ganadoras es que siempre encuentran pasión y compromiso en lo que hacen. Ya no solo es necesario permanecer en el mercado, sino, además, estar en la mente del cliente o del consumidor. Hay que tomar en cuenta que vivimos hoy en una sociedad súper comunicada y que destacar requiere de mucha creatividad, pero también de cumplir con ciertos requisitos para estar siempre y en todo momento presentes y posicionados en el sector que nos pertenece.

Te comparto 5 formas de construir una empresa o marca ganadora:

1.- Planifica.-  Debes empezar calendarizado todo aquello que consideres importante e ir ejecutando cada uno de tus planes de acción. Así podrás ir cumpliendo tus objetivos uno a uno y evaluar los resultados.

2.- Innova.- Procura siempre salirte de lo convencional y crear cosas nuevas para cada cliente específico. No repitas ideas, ni estrategias, cada caso es diferente y tu cliente necesita sentirse especial. Rompe las reglas.

3.- Cumple.- Se puntual y cúmplele a tu cliente en tiempo y forma. No ofrezcas cosas de más. Recuerda que tu palabra es importante y tienes que generar la confianza adecuada. Mide tus tiempos de trabajo para que te ayudes a cumplir.

4.- Arma un buen equipo de trabajo.- Junta a gente que esté comprometida con lo que hace. No solo que individualmente sean personas que valgan la pena, sino que sumen esfuerzos contigo para lograr trabajar cada proyecto en armonía. Las ideas de varios siempre serán mejor que las tuyas solo.

5.- No escatimes.- Cada cliente y cada proyecto es extremadamente importante. Por lo que tienes que lograr su entera satisfacción como sea posible. Recuerda que un cliente enteramente satisfecho es la mejor recomendación que pueden hacer de ti, sobre tu trabajo y tus casos de éxito. 

Lograr posicionarte en la mente del cliente no es fácil, pero una vez logrado difícilmente podrán quitarte ese lugar. Lo importante aquí es realizar cada trabajo con compromiso. Incluso adelantándote a las posibles contingencias que pudieran suceder y que están fuera de tu alcance. Estos cuidados en el corto plazo te redituarán dividendos a largo plazo y en la relación con tu cliente. Así es que mientras haya marca… hay esperanza.