La semana pasada hablaba aquí  de que, según  algunos datos recientes, los especialistas en el tema han asociado la obesidad con el riesgo de infertilidad y que en las mujeres obesas es posible la presencia de alteraciones del ciclo menstrual,  anovulación y en consecuencia la posibilidad de alteraciones en la fertilidad y en los varones, decía en el artículo anterior, hay evidencia científica reciente del impacto que causa  la obesidad sobre la fertilidad.

Para concluir este aspecto señalo hoy que, en 2004, Jensen y cols. reportaron que a mayor Indice de masa corporal (IMC) en los hombres, menores niveles de hormonas sexuales, concentración espermática y número total de espermatozoides.

Es importante señalar que no todos los hombres obesos presentan problemas de infertilidad, pero que la presencia de obesidad mórbida es más frecuente que se asocie con ella. 

En el caso de las hormonas sexuales la obesidad puede llevar a la presencia de un perfil hormonal alterado, sugiriendo una posible alteración endocrina en el varón obeso y constituirse así como un posible riesgo de alteraciones en el líquido seminal que puede traducirse en infertilidad. Lo anterior también ha sido señalado por Martínez López (2001).

Hay que señalar que, además de la obesidad, pueden influir otros factores como puede ser el estilo de vida.