Como buen fin de año, empiezan los planes para cumplir en el año venidero. Comenzamos con una lista interminable de deseos por realizar y metas que alcanzar. Y normalmente sucede lo mismo año tras año, escribimos la lista y no la volvemos a tocar jamás. Y esto es normal debido a muchas razones, empezando por nuestra falta de disciplina para llevar un régimen necesario que nos ayude a cumplir con dichos objetivos. Si bien es cierto que no es fácil, tampoco es imposible. 

Necesitamos sacrificar algunas cosas para cumplirlos, pero principalmente poner de nuestra parte si realmente queremos lograr los cambios deseados en nuestra conducta. Por lo que hoy te mencionaré 5 elementos que te ayudarán a cumplir tus objetivos siempre:

1.- Medibles.- Mencionar objetivos por cumplir es muy sencillo, pero ponerles unidad de medida complica un poco las cosas. Por lo que te recomendaría que tus objetivos los puedas medir para ir evaluando cómo vas progresando a través del tiempo.

2.- Cuantificables.- Otra característica es que contengan una cantidad o plazo determinado, para  evaluar también el cumplimiento. Con estos dos primeros puntos, ya puedes delimitarlos en tiempo y cantidad para ir monitoreando tu avance.

3.- Alcanzables.- La principal razón del abandono para cumplir los objetivos es que se escriben objetivos irrazonables o difíciles de alcanzar. Si de entrada sabemos que algo se dificulta, no lo pongamos en la lista y vayamos paso a paso para ir avanzando en forma segura.

4.- Retadores.- Describe objetivos que sean un reto para ti realmente. Las acciones que ya sepas que vas a realizar o las que estén seguras no forman parte de estos objetivos reales, pues ya son actos que sólo falta consumarlos. El reto está en fijarse el objetivo e ir por él.

5.- Originales.- Los momentos y objetivos deben de ser tuyos y no de la gente en tu entorno. Desgraciadamente muchas veces luchamos por cosas que quieren los demás y no por las que queremos nosotros. Se tú, cualquiera que seas, pero siempre que prevalezca tu esencia.

Procura ir monitoreando tus avances en el transcurso del tiempo, si no, no podrás ir evaluando tu conducta o tu estrategia para rediseñarla y cambiarla de ser necesario. Recuerda, objetivos por cumplir… año por vivir.