Por una Mérida con futuro

El reto es desviar la urbanización dispersa de nuestra Mérida de su rumbo actual, insostenible, y dirigirla hacia el desarrollo de una ciudad más verde...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Siguiendo con  el tema de una Mérida verde, entendamos que es obligatorio y viable un mejor futuro para las ciudades del mundo en el marco de su sostenibilidad. Históricamente, las ciudades han sido espacios no de miseria y sufrimiento, sino de oportunidad en diferentes escenarios, como las economías de escala, el empleo y mejores niveles de vida, especialmente para las personas del medio rural que migran en busca de una vida mejor; las ciudades han sido impulsoras del progreso social y del desarrollo económico, no sólo local, sino nacional.

Es indispensable crear en las ciudades condiciones para aprovechar ese potencial, decisivo para asegurar una mejora continua en los próximos decenios. El reto es desviar la urbanización dispersa de nuestra Mérida de su rumbo actual, insostenible, y dirigirla hacia el desarrollo de una ciudad más verde, sostenible, compacta, comunicada, que ofrezca nuevas opciones, oportunidades y esperanza a todos sus habitantes.

Se cree que el concepto de “ciudad verde”, con capacidad de recuperación, autosuficiencia y sostenibilidad social, económica y ambiental, sólo es viable copiando la planeación urbana de países desarrollados; en realidad, debemos entender que tenemos que evolucionar hacia un eco-urbanismo ligado a las altas tecnologías, caminando hacia una ciudad rica en espacios y vías arboladas, impulsando el desarrollo industrial de “circuito cerrado”; es decir, que no produce desechos.

Sin embargo, su aplicación sólo es viable con un cambio total en el actual modelo insostenible de nuestra ciudad; o sea, que no se trata de copiar lo que hacen otras ciudades, sino de acordar nuestras propias estrategias sociales, económicas y ambientales, para evolucionar a una ciudad con futuro.

Para ello, los principios de las ciudades verdes nos pueden orientar hacia un desarrollo urbano que garantice la seguridad alimentaria, el trabajo justo con ingresos dignos y una verdadera gobernanza con la participación de todos; entonces, debemos reconocer e incorporar a la política y la planeación urbana muchas de las soluciones creativas que la propia población ha propuesto en numerosas ciudades para fortalecer sus comunidades y mejorar su nivel de vida. Caminemos juntos.

Lo más leído

skeleton





skeleton