Estamos ya en el nuevo año y, cuando menos lo esperemos, nos daremos cuenta de que ya volvió a pasar. Por eso, los expertos recomiendan hacer propósitos y ponerse metas a cumplir, para que aprovechemos el paso del tiempo de forma positiva.

Este año será interesante para la política, tendremos candidatos, empezaremos campañas y volveremos a tener el baile político-ciudadano. Debo decir que me emociona mucho, pero pienso que todos deberíamos tener propósitos para tener una experiencia agradable.

El primer propósito deberá ser hacer política de la buena, sin descalificaciones o insultos o chismes. Vamos a hacer propuestas viables, que beneficien a todos y que nos hagan tener una mejor vida.

Los políticos también deberían ser buenas personas siempre, no nada más durante el tiempo de campaña. Hay una caricatura de un Frankenstein regalando flores a una niña, otros niños hablan entre ellos y uno le dice al otro: es que está en campaña. No queremos más “Frankenpolíticos”.

Vamos a hacer de las redes sociales un espacio agradable y emocionante, hay que dejar de retuitear todas las felicitaciones que nos hacen, así como los saludos masivos y los mensajes que no dicen nada. Mejor vamos a publicar cosas interesantes, que nos dejen ver quiénes son, que nos den información de lo que hacen, lo que quieren y cuál es su filosofía de vida. No más: “Estoy con mis compañeros fulano y zutano entrando a sesión del Congreso”.  ¡Eso no nos dice nada porque ése es su trabajo!

También deberían hacer el intento de manejar personalmente las redes sociales y esa va con mensaje directo para el gobernador. Es una persona que le cae muy bien a la gente y el hecho de que no sea él, le baja puntos a la buena percepción que ya de por si tiene. Y mire, seamos honestos, si fuera una persona que de plano no da una, lo entendería, pero no es el caso. El gober es una persona inteligente que podría aprovechar muy bien ese escaparate.

Un propósito, pensando en las campañas, sería que los candidatos hagan solamente artículos promocionales que sean de utilidad para la gente y que se encarguen de limpiar su propaganda cuando todo termine. Siempre dicen que lo hacen pero nunca lo cumplen.

Y como ciudadanos, debemos proponernos ser responsables con nuestro voto. Pensar bien a quién le vamos a dar la responsabilidad de representarnos y tomar decisiones por nosotros. Porque no todo lo malo que pasa en el país es culpa de las autoridades, se nos olvida que somos nosotros quienes los ponemos ahí. 

Que este año esté lleno de alegría, paz, buena política y buenas decisiones. ¡Que empiece el juego!