Empieza una nueva era. Y los amables lectores se preguntarán: ¿de qué se trata? Bueno, de entrada, nada con el rollo de los partidos políticos y sus grotescos aspavientos reflejados en sus principales militantes. Por ejemplo, qué espectáculo tan bochornoso han brindado a sus militantes y ante la sociedad en general Gustavo Madero y Ernesto Cordero, aspirantes a la dirigencia nacional de los panuchos.

Puras descalificaciones que sólo reflejan el empobrecimiento (pero no de dinero, porque de eso sí están cargados) en el discurso de estos dos políticos, claro, si es que así puede llamárseles. Hace unos días, Cordero Arroyo estuvo en Yucatán haciendo proselitismo, apoyado por su coordinadora de campaña en la entidad, la senadora Rosa Adriana Díaz Lizama, la tradicional oportunista que no sabe ni quién fue el fundador de Acción Nacional –Manuel Gómez Morín, se lo pasamos al costo-, y en la parte final de su show, en un mitin en Mérida, tuvo su ya famoso desliz: “Quiero ser presidente del PRI…”.

Claro está que su rival, Gustavito Madero, supuesto pariente del legendario Francisco I. Madero (nos imaginamos al ex presidente de México revolcándose en su tumba por las boberías de su familiar), también se cuece aparte.

Sólo pidiendo los famosos “moches” para que sus allegados voten por aprobación de obras y demás prebendas a cambio de recibir una buena parte de la plata invertida, por lo general, recursos federales o estatales, el ahora dirigente panista con licencia y, a la vez, candidato, es un total descarado.

Y esta es una parte de la política nacional. En el medio local, están los dimes y diretes entre panistas y priistas por, realmente, tonterías. El supuesto líder de Acción Nacional en la entidad, Hugo Sánchez Camargo, abrió fuego para descalificar el Primer Informe de Gobierno de Rolando Zapata Bello por una obra realizada en el municipio de Tekal de Venegas, una canchita de futbol rápido, la cual fue incluida como ejecutada por el Ejecutivo. 

En caliente, “Don Pavón” (Carlos Pavón Flores), dirigente estatal del PRI, metió su cuchara para desmentir a su adversario panucho y censuró la labor del alcalde de Mérida, Renán Barrera Concha, por varias anomalías, sobre todo viajes a las “uropas” con amplio despilfarro de billetes y las obras inconclusas en la calle 60.

PRIMERA CAIDA.- Señores y señoras, chiquillos y chiquillas, la nueva era se trata, en realidad, de la temporada de beisbol de la Liga Mexicana de Verano y los renovados Leones de Yucatán, con nuevos dueños y fuertes aspiraciones a competir, con los mejores elementos, con los otros “trabucos” de bateadores y lanzadores.

SEGUNDA CAIDA.- Independientemente del resultado que los Leones hayan sacado en su debut ante los Piratas en Campeche, la escuadra promete ser competitiva, con mucha garra y, sobre todo, sin amarres del pasado y las nostalgias de los yucatecos idos.

TERCERA CAIDA.- Se trata, simplemente, de ganar, lo que hace tres temporadas no hacen los melenudos. ¿Quién se acuerda de los burdos políticos? Yo no.