Nuestros valiosos atletas cerraron su participación en la Olimpíada Nacional de Baja California en la novena posición, cosechando 193 medallas: 52 de oro, 71 de plata y 70 de bronce, un desempeño inferior al del año pasado, cuando la delegación quintanarroense obtuvo 218 medallas, 68 de ellas doradas, para ubicarse en el séptimo lugar nacional.

Precisamente el séptimo lugar lo ocupó ahora Yucatán, mientras Campeche quedó en décimo quinta posición. Aceptable por permanecer en el top ten, pero lamentable por retroceder dos peldaños.

Pero no todo ha sido miel sobre hojuelas para estos destacados deportistas, pues Luvia Ciau ha vivido en carne propia la falta de compromiso por parte de la Comisión Para la Juventud y el Deporte (Cojudeq), pues sus familiares han denunciado en varias ocasiones que la dependencia no le daba el apoyo para su sostenimiento a tiempo, a pesar de ser campeona nacional.

El mérito es de los atletas que dejaron el cuerpo y el corazón en sus competencias, mirando hacia atrás los sacrificios y carencias que han tenido que enfrentar ya que en el estado no cuentan con la infraestructura y apoyo deportivo que si gozan otros competidores.

Con la destacada actuación de valores chetumaleños como Daniel Torton, Leonardo Ramos y la campeona centroamericana Carolina Valencia, Quintana Roo cosechó 53 medallas en la disciplina de levantamiento de pesas, de las cuales 16 fueron de oro, 20 de plata y el resto de bronce.

Fue la halterofilia la que dio más preseas a la delegación caribeña, para colocarse en la novena posición del medallero nacional, superando a Chihuahua gracias a las 16 medallas doradas que se colgaron los deportistas. 

La que brilló con luz propia fue la chetumaleña Carolina Valencia, orgullo de la capital quien barrió con sus rivales en la categoría élite de 48 kilogramos, quedando a solo 5 kg de romper su propia marca, que es récord panamericano.

De hecho, la joven atleta chetumaleña aseguró un espacio en la selección nacional mayor y competirá tanto en el mundial, como en el próximo encuentro panamericano.

Pero el cierre con broche de oro lo dio la jovencita Luvia Ciau, orgullo de José María Morelos, quien dio la sorpresa al derrotar en luchas asociadas a la gran favorita de la competencia, la jalisciense Lluvia Álvarez, quien llegó con mejores números en el papel.

El año pasado la quintanarroense se quedó con el tercer lugar, pero en esta edición a pesar de no ser la favorita sacó la casta para colgarse su tercera medalla de oro en seis participaciones olímpicas.

Contra viento y marea, los atletas quintanarroenses a puro pulmón, mantuvieron al estado entre los 10 mejores del país. Un logro digno de elogios y reconocimiento en tales circunstancias.