Que Mancera nos diga si le gusta la mota (su despenalización)

Hoy las dosis permitidas son tan pequeñas que ante los ojos de la autoridad cualquiera se vuelve un narcomenudista y enfrenta a un juez y, muchas veces, la cárcel.

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Cuatro ex secretarios de Estado (Hacienda, Salud, Relaciones Exteriores y Gobernación), de los últimos cuatro sexenios, hicieron ayer una propuesta concreta para lograr lo que llaman la descriminalización efectiva de la mariguana en la Ciudad de México. Es muy sencilla: aumentar las dosis que se permite a un consumidor traer consigo. Hoy las dosis permitidas son tan pequeñas que ante los ojos de la autoridad cualquiera se vuelve un narcomenudista y enfrenta a un juez y, muchas veces, la cárcel.

Nada más, nada menos. Es una especie de piloto, de experimento, para saber qué sucede y cómo el inevitable proceso de legalización y regulación de la mariguana puede hacerse de la mejor manera.

Decía bien ayer Pedro Aspe que: “no hay que despreciar los grandes efectos que a largo plazo pueden tener los pequeños cambios”.

Ayer en el evento en la Fundación Miguel Alemán estuvieron, entre otros, el secretario de Salud del Distrito Federal, Armando Ahued, y el líder de la Asamblea del DF, Manuel Granados. A petición de Héctor Aguilar Camín, Ahued habló y volvió a decir que es la voluntad del jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, escuchar todas las voces, que esto se debata... etcétera, etcétera.

La verdad es que el asunto ya no está para debate. Está para legislarse y votarse, y entonces que sepamos todos quién quiere qué. Estos proyectos necesitan liderazgo y decisión. Y el único capaz de ofrecerlo es el jefe de Gobierno. No es que la Ciudad de México hoy permita los matrimonios entre personas del mismo sexo o el aborto porque se hayan debatido hasta el cansancio, sino porque el jefe de Gobierno anterior y su gabinete y su grupo político nos dieron su opinión y pusieron detrás su capital político.

Alargar el debate, mandar a hacer encuestas, “escuchar” a todos es también una buena táctica para que las cosas no se hagan y querer vestirse de demócrata.

Creo que el evento de ayer obliga a Miguel Ángel Mancera a responder una muy sencilla pregunta: ¿Usted cree que hay que cambiar la ley para aumentar la cantidad de una “dosis personal” permitida de mariguana —digamos a niveles de Portugal— para así comenzar la descriminalización efectiva de su consumo?

Sí o no.

Y sobre eso debatimos.

Twitter: @puigcarlos

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