Allá usted si me arrebata la sonrisa y permite que el amor me deje amoratado el corazón mientras los instantes, cada vez más lentos, cada vez menos, desaparecen.

Allá usted que ha hecho de firmar la locura con su nombre una nueva forma de arte, atrayéndola y acorralándola en cada esquina de cualquier habitación, entre cada rincón de cualquier alma enamorada.

Allá usted y todas las ilusiones que va dejando como una estela tras su paso por la vida, por mi vida. Por mi vida.

Allá usted si le teme a la elocuencia del amor, al amar por amar, al amar por vivir, al morir por amar.

Allá usted que ya le ha perdido el miedo al destino y que en mis ojos, ahogados en recuerdos, encuentra libertad.

Allá usted, que me robó la calma, que me marchitó el corazón, que me ha dejado con la locura tatuada a la razón; descalza sobre una estela de ilusiones rotas, me ha dejado incierta para pintar amores en cualquier habitación.