El tema del regreso de los militares a sus cuarteles y la urgencia de expedir reglas claras de su actuación en el combate a la delincuencia organizada será la primera tarea de la Comisión de Defensa Nacional de la Cámara de Diputados, que se instaló la semana pasada y que preside el general yucateco en retiro Virgilio Daniel Méndez Bazán.

Esta Comisión, según el ex subsecretario de la Defensa Nacional, se propone regular el marco de actuación de las fuerzas armadas mexicanas de tierra, aire y mar, en momentos en los que han atendido el llamado del Presidente para coadyuvar con las autoridades civiles en tareas de seguridad. La misión no será fácil pues una integrante de esa Comisión, la diputada  perredista Cristina Gaytán, dijo que impulsará los cambios necesarios para que el Ejército no combata el crimen organizado ni ejerza funciones de policía. 

Lo que no plantea la legisladora es quién relevará a los militares, porque si bien la Constitución establece que en tiempos de paz el Ejército y la Marina no deben estar en las calles, en el contexto actual el Estado mexicano no puede prescindir de su apoyo porque el desafío es muy grande. Suponiendo que soldados y marinos regresen a los cuarteles, ¿cómo quedarían las calles y quién o quiénes los sustituirían, tomando en cuenta la debilidad que acusan muchas policías? 

Aunque no es lo deseable, solo los militares pueden combatir a un enemigo que no sólo está bien armado sino que también dispone de grandes recursos financieros. Desde luego, hay que dar certeza jurídica a la actuación de las Fuerzas Armadas para determinar con claridad en las leyes lo que pueden y deben hacer, pues de los errores cometidos por algunos elementos se ha aprovechado para atacar a la institución.

Hay también un aspecto pendientes que debe atender la Comisión cameral: precisar en qué fuero deben ser juzgados los militares cuando comenten algún delito, pues a veces se les procesa por el fuero civil, otras por el militar o por el federal. 

Caso Guerrero

Tan indispensable es en estos momentos mantener al Ejército y la Armada en las calles, que el pasado martes se anunció el refuerzo de la seguridad en Guerrero y se activó una unidad especializada de combate al secuestro. Al frente de este nuevo operativo se designó al general de división Alejandro Saavedra Hernández, comandante de la IX Región Militar de Guerrero, quien anunció la llegada de más elementos de todas las fuerzas federales de seguridad al estado, como ya está ocurriendo.

Delineó seis objetivos prioritarios: lograr un impacto positivo en la población; aplicar la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos; aplicar la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada, disminuir el índice delictivo y tráfico de drogas, mantener unidades organizadas con capacidad de respuesta inmediata y mantener la paz y tranquilidad en todo el estado.

¿Quién entonces relevará a las Fuerzas Armadas?