Re-crearse al leer
Conforme avanzamos en la lectura se van haciendo más nítidos los detalles que nos permiten descubrir la clave para armar el rompecabezas de la historia.
Para volverse lector quizá sólo baste dejarse llevar por el poder hipnótico de las historias que nos envuelven en sus misterios; interesarnos por algún personaje que poco a poco reconocemos cercano, personajes que nos reflejan una imagen del ser siempre inconclusa, en constante re/construcción. Invisible es el título del libro que leo, María Baranda su autora, Norma la editorial que lo alberga en la colección Torre de Papel Amarilla.
En la revista Letras Libres para responder a la pregunta ¿qué significa escribir un libro para niños?, María Baranda comenzó detallando su propia relación con la lectura y la escritura a esa edad: “Cuando era niña pensaba que no había libros escritos para mí. […] Leer era, en esos días, descubrir mundos lejanos en otras lenguas […] siempre tuve la sensación de que algo me faltaba. Entonces empecé a reescribir aquello que leía, pero con el cuidado de incluirme a mí, a mis hermanos, a mis primas y amigas”.
En la trama del libro acompañamos a Pascual, un niño de quinto grado de primaria, quien, de tanto pasar inadvertido en su casa y en la escuela, logra volverse invisible para casi todos. En esta condición, Pascual descubre el lugar que ocupa dentro de su mundo, el valor de la amistad y la importancia de la relación afectiva entre él y sus padres, diluida entre los innumerables deberes y obligaciones de la vida diaria. ¿Quieres oírle? Te dejo su voz cuando intenta explicarse a sí mismo:
“Regresar es empezar todo de nuevo. No, es volver al mismo punto de partida para hacer algo completamente distinto. No. Regresar es ser el de siempre, el mismo. Sí, eso es. […] Regresar es no volverse a ir. No desaparecer. Es cuidarse, es quererse, es estar en casa. Es tener los mismos amigos”.
Conforme avanzamos en la lectura se van haciendo más nítidos los detalles que nos permiten descubrir la clave para armar el rompecabezas de la historia, regalándonos comprensión… ¿lectora?, ¿de los otros?, ¿de nosotros mismos? Eso dependerá de cada uno.