Las redes sociales serán un ingrediente más que dará un sabor diferente a las campañas políticas, totalmente distinto a ocasiones anteriores; esta vez, los usuarios en redes sociales son distintos, son más maduros en su uso, con más conocimiento para consumirlas y por tanto más exigentes y solicitan información que les ayude a elegir correctamente. 

Hoy la moda es quejarse de todo, más que alimentar la discusión con ideas o propuestas; no sorprende que la clase política tenga reservas de participar a este nivel con la sociedad, si lo único que va a ganar son insultos. Una posible solución sería regular a los usuarios en las cuentas, limitar a los que se “pasan de la raya”; este camino podría tener consecuencias secundarias funestas, destruyendo por completo el ejercicio democrático. 

Las redes sociales ya son un medio ideal para exponer ideas, debates, reflexiones, respuestas a preguntas, lo que sin duda, no siempre atienden la mayoría de candidatos. Todo parece indicar que a estas alturas los ciudadanos ya comienzan a seguir a los candidatos por cada partido, algunos fans o seguidores, otros por interés de conocer propuestas y apoyar sus convicciones, como ciudadanos comunes y corrientes, ya que sin duda se verán influenciados por las campañas social media que realizará cada político. 

Pero “ojo”: la ausencia de un marco legal electoral que considere a la web como espacio de difusión hace que muchas de las estrategias electorales que en su momento dieron resultados, hoy se permitan sin ningún control legal. 

La reforma constitucional y legal electoral de 2007 prohibió a los partidos hacer convenios en radio y televisión; lo pueden hacer sólo en medios impresos. El caso del Twitter, Facebook, YouTube y otras redes sociales, quedaron al margen y son aprovechadas para las guerras sucias. 

Hay cuestiones que por ejemplo a la “gente normal” les gusta, es decir a la más madura en redes sociales entiende la guerra sucia y el juego del exhibicionismo, así que el uso de vídeos, fotografías y fotomontajes para desprestigiar, serán sin duda contenidos que no lleguen a cambiar mucho el voto de los usuarios maduros de redes sociales. A muchos nos encanta que el candidato por el que estemos pensando votar nos salude, responda preguntas y peticiones e interactúe. 

Creo que la mayoría vemos de los políticos en las redes sociales sus mensajes que son más para promocionar sus objetivos o exaltar artículos en los que se habla de ellos.

Pues resulta que en días pasados nos enteramos que dentro del DIF estatal habían “fantasmas” que por arte de magia cobraban apoyos para adultos mayores aun y cuando estos últimos ya tenían varios meses de fallecidos. según información proporcionada por el propio director del sistema Jesús Rodríguez Herrera, descubrieron a más de 120 personas dentro de la lista de beneficiarios del apoyo que ya habían fallecido meses atrás, y al tener los familiares las tarjetas bancarias se aprovecharon para cobrar el dinero sin dar aviso a las autoridades. 

Esta situacion obviamente causó molestia a las autoridades, que ni tardos ni perezosos “tumbaron” a los muertitos para darles entrada a abuelitos que estaban en lista de espera desde hace meses. Ahora el método de pago será a la antigua, es decir en sobre amarillo y directamente al beneficiario, para que el abusivo familiar no pueda pellizcar la lana del abuelito.

Gabinete movido

Pese a estar en pleno proceso electoral existen varios servidores públicos que tienen puesta la camiseta al seguir como se dice en el bajo mundo “taloneándole” para sacar la chamba aun y con la cuestión económica adversa. Podemos mencionar a Rafael Muñoz Berzunza, Patricio De la Peña, Mauricio Rodríguez Marrufo, Manuel Valencia Cardín y Juan Carlos Azueta Cárdenas.