Sobre “La bohème”
La bohème (La bohemia) es una ópera en cuatro actos con música de Giacomo Puccini y libreto en italiano.
Ayer se estrenó la ópera “La bohème” de Giacomo Puccini, como parte del concierto final de esta temporada de la Orquesta Sinfónica de Yucatán (OSY). La dirección orquestal estuvo a cargo de Juan Carlos Lomónaco y la dirección de coros de Luis Luna Guarneros.
La bohème (La bohemia) es una ópera en cuatro actos con música de Giacomo Puccini y libreto en italiano de Giuseppe Giacosa y Luigi Illica, quienes adaptaron libremente episodios de la novela por entregas Escenas de la vida bohemia de Henry Murger. Fue estrenada en 1896 bajo la batuta de Toscanini.
Al momento de escribir estas líneas apenas comienzo a emperifollarme para el concierto de gala del viernes por la noche; sin embargo, durante la semana tuve la oportunidad de asistir a los ensayos de la orquesta, una experiencia totalmente diferente, pues pude ver los entretelones de cómo se fue gestando la puesta en escena y lo pesado de la labor de los músicos para sacar adelante este concierto de más de 3 horas.
Este ejercicio periodístico fue refrescante, ya que, por un lado, uno como espectador es capaz de desentrañar todo lo que conlleva un montaje de estas dimensiones y atestiguar los esfuerzos conjuntos y coordinados de los distintos protagonistas y responsables de realizar un espectáculo artístico de calidad como el que seguro podrán atestiguar en las 6 presentaciones que tendrá en el Peón Contreras.
La bohème es una colección de viñetas retratando jóvenes bohemios viviendo en el Barrio Latino de París durante la primera mitad del siglo XIX. La trama se centra principalmente en las relaciones amorosas de un puñado de artistas y el entorno que les rodea, donde diversos personajes hacen su aparición.
Todo esto ambientado y contextualizado gracias al trabajo de Horacio Almada (director de escena), Mauricio Trápaga (escenografía) y Adriana Ruiz (vestuario), cuyos progresos pude atestiguar a lo largo de la semana. Si bien no acostumbro acudir a ensayos, pues considero que como periodista lo único importante es el resultado, en esta ocasión podré mirar con otra óptica toda la génesis y el sudor para que propios y extraños disfruten de este noble arte que no es inspirado por la musa Calíope, sino por seres terrenales de carne y hueso. Dicho lo anterior extiendo mi reconocimiento con esta loa: ¡que viva la vida bohemia!.