Desde 2000, para los gobiernos que conforman la ONU, la expresión “delincuencia organizada” entraña protección y garantía de impunidad a criminales por parte de funcionarios públicos y corporaciones policiacas, jueces y otros burócratas, pero es imposible no asombrarse con la corroboración documental de la manera como se engarzan esas relaciones.

Es el caso, por ejemplo, del video en que se ve al señor apodado La Tuta como jefe de gabinete dando instrucciones, chacoteando y tratando como compinches al presidente municipal de Lázaro Cárdenas, a su secretario de Finanzas, a su oficial mayor, al representante empresarial de la principal zona aguacatera de México y a un exalcalde de Apatzingán.

También es distinto saber que Los caballeros templarios, entre sus múltiples actividades criminales, lograron convertirse en prominentes “exportadores de minerales”, a enterarse ayer de que un barco cargado con ¡68 mil toneladas de hierro!, y que había zarpado precisamente de Lázaro Cárdenas, fue interceptado en Manzanillo, Colima, ignorándose aún de qué mina michoacana pudo haber sido extraído…