Tragedias naturales

Nos movemos en una historia donde dos hermanas cuyos nombres, Arcángela y Serafina, distan de ser fieles a sus denotaciones.

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Las lecturas que más impactan son las que definitivamente se quedarán en el recuerdo del lector. Basta una frase perfectamente escrita, un personaje que haya tocado partes de una empatía personal, la descripción de un gesto o incluso un sentimiento encontrado entre lo más obscuro de nuestra venganza latente interior. Siempre hay algo que queda, algo que nos mueve.

En Las muertas (1977) de Jorge Ibargüengoitia, nos encontramos con historias basadas en hechos reales que ocurrieron en los años cincuenta en un lugar de Guanajuato. Naturalmente, en la novela, tanto los personajes como las locaciones han sido modificados. Nos movemos en una historia donde dos hermanas cuyos nombres, Arcángela y Serafina, distan de ser fieles a sus denotaciones; hay, en cambio, una suerte de maldad dudosamente justificada.

El punto de partida de la historia, y el suceso por el cual posteriormente se descubren tres muertes silentes, es una venganza amorosa que tiene lugar en una panadería. Dentro de ella se encuentran Simón y una empleada, y en el umbral de la puerta, están Serafina y dos ayudantes que descargan ráfagas incesantes procedentes de pistolas y escopetas. Entre gritos y letras, Serafina nos hace partícipes al dirigirse a Simón y decirle: “¿Ya no te acuerdas de mí, Simón Corona? Toma, para que te acuerdes”. Tiempo atrás, le había roto el corazón.

Arcángela y Serafina eran dueñas de dos prostíbulos famosos alejados de la ciudad; también eran dueñas de tragedias naturales que parecían estar escritas en los destinos de sus empleadas, quienes bajo su cuidado habían muerto entre accidentes y enfermedades, o entre órdenes y castigos. A la par, una aparente fuerza gubernamental y sus esfuerzos nulos a través de personajes sobornables funcionan como elementos que mantienen con vida las dinámicas de prostitución y, por ende, la permanencia de los conflictos en la historia.

Finalmente, entre testimonios, verdades y coartadas increíbles, los personajes nos dan una historia completa. También conocemos mediante letras cómo suena la caída de un cuerpo al chocar con el cemento y cómo, sin querer, nos descubrimos sintiendo por ellas; las muertas.

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