Un distrito abandonado
Diputados locales como Juan Manuel Herrera (PRI) mantienen un bajísimo perfil, sin que se tenga noticia de actividades
Diputados locales como Juan Manuel Herrera (PRI) mantienen un bajísimo perfil, sin que se tenga noticia de actividades, iniciativas y propuestas de su parte. Esto pese a que el bacalarense atiende –al menos en el papel– al tercer distrito sureño que abarca el triángulo integrado por Bacalar, Ribera del Río Hondo y zona en litigio con Campeche.
Las necesidades de ese distrito son enormes, y ha sido un expediente complejo que se ha negado a atender Juan Manuel Herrera, cuya única acción visible fue la gestión para que el astro brasileño de futbol, Romario, diera un partido de exhibición en la unidad deportiva de Bacalar, dejando plantado a todo mundo, incluidos menores de edad que abrigaron la ilusión de pedirle un autógrafo al amazónico mundialista.
Está comprobado que Juan Manuel Herrera no puede solo con el paquete –incluso, ni ha hecho el intento de aplicarse en esta encomienda–, y su posición está desperdiciada causando enorme afectación a un extenso distrito que queda sumido en el abandono.
La ribera del Río Hondo tiene sus necesidades apremiantes, pese a contar con el cultivo de caña de azúcar para abastecer al ingenio San Rafael de Pucté. Pero esta zona es mucho más que el cultivo más exitoso en nuestro estado por décadas.
En la misma condición se encuentra la localidad de Nicolás Bravo, cercana a la zona en litigio con Campeche y que pertenece a Quintana Roo. La presencia legislativa debe estar a la altura del desafío, pero diputados como Juan Manuel Herrera nada pueden aportar.
Niñas y niños en su día
Niñas y niños están de plácemes en este su día, cuando el recreo en las escuelas de nivel básico se prolonga más de la cuenta, al ser recortada significativamente la jornada de aprendizaje por un merecido festejo que motiva una revisión y reflexión sobre los niños que se desenvuelven en condiciones adversas, incorporados prematuramente al trabajo y apartados de la escuela.
La obligación de gobierno y sociedad es proporcionar todas las facilidades para que los menores de edad tengan acceso a la educación, aunque en el caso de Quintana Roo los acentuados movimientos migratorios representan un enorme desafío en Cancún y Playa del Carmen, colocando en jaque al gobierno del estado.
Y más allá de la educación, las familias deben satisfacer sus necesidades de alimentación y atención a la salud, algo que difícilmente se atiende por completo a nivel nacional, lo que ha impulsado el Presidente Enrique Peña Nieto a lanzar su Cruzada Nacional Contra el Hambre.
Más allá de este festejo merecidísimo, todos los días los niños deben ser nuestra prioridad, recibiendo un apoyo decidido y significativo de sus mayores para que se desarrollen en las mejores condiciones.