Una contraportada
De igual modo se presta atención a la importancia de los títulos.
Obra reunida. Narrativa breve es la edición de Alfaguara del año 2007 que hoy comparto contigo. Su autor es Mario Vargas Llosa, narrador, dramaturgo y ensayista; cuyos escritos han sido premiados y traducidos; y cuya vida ha transcurrido entre Perú, Francia, Inglaterra y España.
Mario, siendo coherente con el subtítulo de esta obra, escribe en ella un breve Prólogo, fechado en 1997, estando en Londres. En él enfatiza que todos los textos que ha reunido tienen como denominador común precisamente la brevedad, y el ser hijos del mismo padre literario.
El libro, además de relatos, contiene también una colección de obra pictórica, proveniente de varios Museos: del Louvre, del Prado, Nacional de Estocolmo; al igual que del Monasterio de San Marco.
Los estudios literarios de nuestros días prestan atención a cada uno de los elementos que conforman el amplio fenómeno artístico; otorgando valor a todas las relaciones que se establecen entre los autores y los lectores, entre los editores y los traductores, entre los libreros y los bibliotecarios. De igual modo se presta atención a la importancia de los títulos, del diseño de los libros, del texto que nos habla desde las contraportadas.
Cuántas veces, el párrafo posterior de un libro, leído con rapidez, marca la diferencia entre nuestra decisión por llevarnos con nosotros el libro, o volver a dejarlo en el lugar del que lo tomamos.
Al ver la contraportada de este libro de Vargas Llosa, leemos: “Relatos alternados que nos muestran el inconsciente colectivo y la experimentación de aquellos momentos ficcionales que reafirman el significado de la existencia”; “muestrario de la diversidad de las pasiones personales y colectivas”.
Volteemos la contraportada, abramos el libro, comencemos a leer…