Es Ricardo Orozco un académico especializado en la investigación histórica acerca de México; intelectual que ha vertido su fecunda labor en la creación de centros de estudio, edición de publicaciones periódicas, y elaboración de ensayos y biografías.

El álbum de Amada Díaz (2003) es una de sus obras; al inicio de sus páginas destaca una breve descripción titulada “Aclaración indispensable”, en la que se nos relata que la vida real y la disciplina histórica le permitieron al autor el escribir una novela, en la que los datos faltantes en el proceso de la reconstrucción de los hechos fueron llenados a partir de la imaginación.

Los capítulos del libro abarcan un período de tiempo: 1911-1918; y abarcan de igual modo diversos registros discursivos: novela histórica, diario, álbum fotográfico, postales de viaje, notas periodísticas.

Amada, nuestra protagonista, inicia la escritura de su Diario un 20 de diciembre del año de 1911, y lo finaliza el 12 de diciembre de 1918. Entre las ideas primeras que vierte sobre el papel leemos: “Me he propuesto escribir en este Álbum los pasajes diversos de mi vida…en él haré mis notas, dejando en sus páginas los recuerdos”. Entre las ideas últimas que concluyen el texto encontramos: “Estuve a punto de romperlo, pero lo conservaré porque sin duda encierra una parte de mi existencia”.

Porfirio Díaz, Ignacio de la Torre y Mier, Amada Díaz, son las figuras centrales del relato, a las que se suma una lista de nombres vinculados al México de principios del siglo XX.

Tenemos ante nosotros una versátil opción literaria: narrada por un sujeto femenino que ha sido elaborado por un autor masculino; una obra clasificada como novela histórica, conformada como Diario, y nombrada Álbum por la protagonista de sus líneas; una suma de hechos cotidianos engarzados con pinceladas de la imaginación.