Voces nahuas en el español yucateco (2)
El Diccionario del Náhuatl en el español de México, dice que mayate procede de máyatl, escarabajo volador multicolor y brillante.
Otros vocablos y giros derivados de la lengua náhuatl en uso en el español regional de zonas rurales y urbanas son zoquete, de zoquite, cochambre del cuerpo humano formada por tierra y sudor, especialmente de los pies; maloliente por lo común: “¡Fo, cómo apesta a zoquete! El Diccionario de la RAE trae siete acepciones sobre zoquete y ninguna tiene el sentido que tiene en Yucatán.
El Diccionario del Náhuatl en el español de México, dice que mayate procede de máyatl, escarabajo volador multicolor y brillante, coprófago que hace pequeñas bolas con el estiércol para depositar ahí sus larvas o huevecillos. Coloquialmente se le llama mayate a quien la hace de varón activo en una relación homosexual: “En el parque Hidalgo se reunían muchos mayates los fines de semana”.
En el maya yucateco antiguo existían varias expresiones para referir a la sodomía y al acto de cometerla: p’enil k’eban (pecar hombre con otro); ah-kuch paach (bujarrón); ah-toop it o ah-toop chun (sodomita); entre otras. La voz k’eban se puede traducir imprecisamente como pecado, pesar o inquietud de conciencia. En el maya de hoy para homosexual masculino se usa xiibil-ch’uup o kankalás.
Dos voces de probable origen náhuatl son chaquiste del náhuatl chianquixtia (chian, chía y quixtía, parecerse a). Enjambre de pequeños insectos y los mismos insectos individualmente, de la orden de los Dípteros, propios de los lugares húmedos y pantanosos que, a la caída de la tarde y primeras horas de la noche, sobrevuelan la cabeza de las personas a manera de un halo, enredándose en sus cabellos y/o en busca de partes húmedas como los ojos, las narices, la boca, etc. Su picadura es muy irritante: “No nos pudimos quedar en la playa, había mucho chaquiste”.
La otra voz es chamaco, forma coloquial de llamarle a un niño o adolescente. Se deriva del náhuatl chamahuac o chamactic, (crecido); aunque esta voz podría ser un mayismo; de chan máak, “persona pequeña”: “La plaza estaba llena de chamacos”, “Se me acercó un chamaquito a pedirme caridad”. En Yucatán también tiene el sentido de “Hijo joven, adolescente, muchachito”: “Te presento a mi chamaco”. También novio(a), aunque esta expresión va cayendo en desuso: “Luis fue a visitar a su chamaca”.