¿Y dónde se esconden los políticos de Chetumal?

Como capital de Quintana Roo, Chetumal cuenta ya con una población que se sacudió el miedo para manifestarse en las calles

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Como capital de Quintana Roo, Chetumal cuenta ya con una población que se sacudió el miedo para manifestarse en las calles, no con marejadas ciclónicas pero si con riachuelos de inconformes por el brutal gasolinazo. Ya en el proceso del cinco de junio de 2016 probó su musculatura, cuando a garrotazos sacó al PRI de Palacio de Gobierno y del Ayuntamiento de Othón P. Blanco.

Pero este vigor social contrasta con una sorprendente anemia de figuras en todos los partidos, porque el PRI es un villano con ejército despreciado, mientras PAN, PRD y Morena –las fuerzas más visibles– cuentan con opciones de polvorón que no han dado el estirón, con excepción del desprendido José Hadad Estéfano –dijo adiós a su partido porque no le permitieron ser candidato pluri a la diputación federal en 2015– y el desplazado Mario Rivero Leal, a quien le impidieron ser dirigente estatal del PAN porque la posición había sido apartada para Juan Carlos Pallares Bueno.

El PRI mantuvo por décadas el monopolio de la participación política en el sur, de ahí que todo político con talento o tino oportunista haya militado en este partido por conveniencia. Pero ante la caída del Tricolor estos modernos revolucionarios están en el desamparo. Algunos permanecen inmóviles y otros están por saltar a Morena, la escudería más competitiva rumbo al no tan lejano 2018.

Entre los priistas con argumentos y buena presencia destacan María Hadad Castillo, Cora Amalia Castilla Madrid, Maritza Medina Díaz, Luis García Silva y Luis Alamilla Villanueva. Y si incluimos a Eduardo Ovando Martínez, este personaje tiene mucha presencia en Cancún y se desplaza con su propio plan de vuelo, lejos de las ataduras de un PRI estatal que se siente muy a gusto en la lona.

Si Luis Torres Llanes abandona la alcaldía capitalina para ser candidato a la senaduría o diputación federal, vaya que dejaría un agujero que no podría tapar un panista, con excepción del combativo Mario Rivero Leal.

Una Luz en la penumbra

La destreza política tiende a pasar desapercibida, lejos de los reflectores. Por ello le advierten que no debo descuidar al asesor estrella del gobernador Carlos Joaquín. Su nombre: Juan de la Luz Enríquez Kanfachi.   

Lo más leído

skeleton





skeleton