Yaxché es una comunidad maya fundada después de terminada la Guerra de Castas, hace poco más de cien años, a raíz de las persecuciones políticas hacia los mayas, quienes se refugiaron en la selva para protegerse del enemigo. Yaxché, en maya, significa árbol verde. En español lo conocemos como ceiba. Un puñado de familias fueron los fundadores y de ahí creció hasta lo que es hoy: un pequeño pueblo de unos seiscientos habitantes. Este pueblo está localizado a treinta y siete kilómetros de Cobá, y comunicado con este último por un camino sinuoso y siempre en mal estado. Curiosamente, en todo el pueblo no había una sola ceiba, hasta hace poco que alguien les donó un par de estos místicos árboles. Ahora éstos hacen honor al nombre del pueblo.

Como todo, Yaxché y los demás pueblos mayas están en un proceso de modernización; más acentuado en las últimas décadas. En la mayoría de las comunidades quintanarroenses hay energía eléctrica y alumbrado público, agua potable, televisión satelital, algunas calles pavimentadas, y, por programas sociales, algunas familias cuentan, desde hace años, con casas hechas de block y cemento. Las pequeñas palapas de antaño se siguen utilizando. Quienes tienen una casa de material usan las palapas como cocina. Rara es la casa que cuenta con una cama pues la mayoría de las personas duermen en hamaca.

La mayoría de los adultos no habla español, principalmente los más viejos. Las mujeres de mayor edad nos deleitan aun portando sus blanquísimos hipiles de floridos y estéticos bordados. Los usan diariamente y es un verdadero orgullo para quienes amamos la cultura maya. Por otro lado, pocas son las niñas que lo usan. Los hombres parecería no tienen un traje típico porque visten con ropa casual.

En la comunidad hay tres escuelas: maternal, jardín de niños y escuela primaria bilingüe. Quienes desean continuar sus estudios deben viajar diariamente a Chanchen Palmar o a Chan Chen 1 en el transporte público gratuito proporcionado por el municipio de Tulum. Estas otras comunidades están ubicadas a no más de 10 kilómetros de Yaxché. Existe un pequeño centro de salud a cargo de un enfermero, quien sólo tiene facultades para atender casos muy leves de enfermedad. Para servicios de salud más especializados se tiene que viajar a Playa del Carmen o a Valladolid; o esperar la caravana de salud presente en la comunidad una vez al mes. “Prohibido enfermarse de gravedad”, es lo que algunas personas repiten de vez en cuando. 

El chocolate y el pozol, en celebraciones como el Hetzmek y el Hanal Pixán, han sido reemplazados por los refrescos embotellados, tristemente. El primero, bautizo maya, es la consagración a los dioses del bebé, usualmente menor de un año. El segundo, no es más que la celebración del Día de Muertos.

Poco a poco, los pueblos indígenas van perdiendo su sabor y color.