MÉRIDA, Yucatán.- En Ticul, todo transcurría con normalidad en la calle 16 x 27 y 29 del barrio de San Juan a eso de las 8:00 de la mañana, cuando los gritos desesperados de auxilio de la madre de un joven, Diego "N", rompieron con la tranquilidad: al infortunado se le había parado el corazón.

En el lugar de la repentina muerte, se averiguó Diego se encontraba en su casa cuando su madre acudió a verlo; lo encontró inconsciente y, en su desesperación, le avisó a un familiar; éste pidió la ayuda de la policía municipal.

En minutos, acudió un paramédico municipal, quien encontró al joven ingeniero, empleado de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) sin signos vitales; no le quedó más que avisar a la Fiscalía General del Estado (FGE) para las diligencias de ley.

Circulan dos versiones de la inesperada muerte del joven; una de ellas es que Diego estaba en el baño de su casa cuando la muerte lo sorprendió; la otra, que se encontraba descansando en su hamaca; en lo que sí coincidieron las fuentes es que se trató de un infarto al corazón.

El lugar fue acordonado por elementos de la policía municipal así como elementos de la secretaría de seguridad pública para las investigaciones sobre la causa de la muerte del joven profesional.

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