Prueban posible vacuna contra el SIDA entre 120 voluntarios de Yucatán
La vacuna es la primera en 10 años que llega a fase para humanos
MÉRIDA, Yuc.- Muy pronto podría existir una vacuna contra el VIH/SIDA y las personas estarán protegidas de esta enfermedad que ha terminado con millones de vidas desde que inició la epidemia; gracias a un antígeno desarrollado por el laboratorio Janssen, en cuyo ensayo clínico participaron 120 yucatecos.
El grupo de 120 yucatecos participó en dicho ensayo, luego de cuatro décadas en las que esa enfermedad ha causado millones de muertes en todo el mundo y México no es la excepción.
Anticuerpos
Este proceso entró en su última fase en Yucatán, por lo cual 120 voluntarios no contagiados de VIH esperan ahora la generación de anticuerpos para prevenir la enfermedad.
Lo anterior, bajo la supervisión de especialistas de la Unidad de Atención Médica e Investigación en Salud (Unamis), que aplicaron el antígeno desarrollado por el laboratorio Janssen.
Según Juan Rivero Alcocer, científico de la Unamis, con el ensayo clínico llamado “Mosaico”, la farmacéutica Janssen busca probar la efectividad de una vacuna, que sería la primera en 10 años que llega a fase tres para su prueba en humanos.
Vacuna por fases
Expuso que la primera fase de una vacuna experimental se aplicó en laboratorio, específicamente en bacterias; en la segunda fase, los científicos trabajaron con roedores y mamíferos como conejos, equinos y primates; y en la tercera fase, la efectividad del biológico se aplicó en humanos.
Hay que señalar que esta investigación reclutó a cerca de 3 mil 800 personas a nivel mundial, entre hombres heterosexuales y personas transgénero de Estados Unidos, España, Italia, Polonia, Argentina, Brasil, Perú y México.
Este ensayo se realizó bajo la modalidad del "doble ciego", es decir, que a la mitad de los pacientes se les suministrará la vacuna y al resto una solución que no contiene el compuesto activo, llamado comúnmente placebo.
Voluntario yucateco cuenta su experiencia
El joven yucateco Daniel P.C., explicó que decidió participar pues las personas con VIH son un grupo históricamente vulnerado y discriminado.
"Es un gran reto porque duele, no solo la vacuna, sino los análisis, las tomas de muestras y sobre todo la ignorancia sobre el tema y más el estigma de la enfermedad", explicó.
Finalmente, dijo sentirse contento de colaborar con la ciencia, por el progreso de la sociedad y por un mejor mundo, y deseó que efectivamente se logre encontrar una vacuna contra el SIDA.
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