Si te encuentras entre la parte de la población que vivió su infancia o adolescencia durante los años 90 o antes, seguramente recordarás lo diferentes que eran las formas de entretenimiento que tenias a tu alcance comparado a lo que hay hoy en día.

Las tardes en las calles de tu barrio con los amigos, pateando a la pelota ya cambiaron por noches y casi madrugadas frente al ordenador jugando al Fortnite con ciber amigos de todo el mundo.

Esta quizás sea una de las revoluciones de más peso en nuevas generaciones. Vale la pena remarcar que esto empezó con las consolas de Atari o Super Nintendo en los años 80, en los que apenas había unos cuantos botones en el mando y los gráficos estaban más cercanos a pixeles pegados uno con otro y en los que la imaginación era un factor importante para intentar ponerle una cara a los personajes.

Saltamos 40 años adelante y hoy en día los videojuegos se convirtieron en un deporte, los E-sports. Los atletas de esta disciplina pueden llegar a ganar millones de dólares, juegan al FIFA en clubes reales de fútbol.

Y gracias a la expansión de Twitch, cada vez más y más jóvenes buscan profesionalizar su posición en el mundo de los videojuegos gracias a la monetización que ofrece esta plataforma y que te permite hacer crecer una comunidad de seguidores que pagan por ver tu contenido.

En relación con los videojuegos en línea, existe una industria que igualmente sacó muchos beneficios del desarrollo del internet y de los avances tecnológicos de la revolución digital.

La gran popularidad de los videojuegos en línea hizo que la demanda de ocio por parte de la población se trasladara a pedir entretenimiento en línea y desde casa. Fue aquí donde la industria de los casinos en línea aprovechó su oportunidad para instalarse como la plataforma por excelencia de los juegos en internet.

Póker, blackjack, ruleta o los tragamonedas hacen parte de las modalidades de juego más demandadas en internet. Las plataformas de casinos en línea ofrecen un catálogo de juegos que busca replicar el entretenimiento que uno puede encontrar en un casino físico, pero esta vez desde la comodidad de casa y con acceso directo desde una computadora o desde un smartphone.

El auge de popularidad de estos juegos se explica igualmente por los avances tecnológicos que permiten a los desarrolladores ofrecer juegos cada vez más cercanos a la realidad, con croupiers en carne y hueso, con mesas de juego en vivo junto a jugadores reales jugando en tiempo real y con modalidades de juegos clásicas, pero con nuevas reglas, como el Caribbean Póker.

Y finalmente, si hablamos de casinos y apuestas, tenemos que hablar del sector deportivo.

El fútbol siempre fue un modo de entretenimiento tradicional en México que remonta su popularidad a los primeros clubes que se fundaron en Pachuca y Guadalajara al inicio del siglo XX. Sin embargo, hoy en día, el fútbol dio lugar a nuevas disciplinas que se originan a partir de este deporte.

Hablamos de las apuestas de fútbol mexicano que cada vez más congregan a más aficionados. Diversas encuestas entre fans del fútbol concluyeron que el aficionado que apuesta al mismo tiempo en los partidos que mira lo hace porque le da una emoción superior al juego e incluso puede llegar a vivir con más pasión un partido entre dos clubes que nunca siguió.

Pero el mundo de las apuestas deportivas también se convirtió en una disciplina casi científica, al haber expertos que realizan estudios probabilísticos y estadísticos de cientos de partidos para determinar buenas prácticas a la hora de escoger partidos en los cuales apostar. Muchos de entre ellos ofrecen incluso sus conocimientos a las grandes masas, y hasta cobran por estos servicios.

Lo cierto es que pocos de entre ellos hubieran podido anticipar el vuelco que daría el entretenimiento entre aquellos años 90 de nuestros días.