Guía del viajero: sobrevive al transporte
Estos consejos te ayudarán a que tus viajes sean más llevaderos.
Agencia
CIUDAD DE MÉXICO.- Para ayudar a que los viajes sean más llevaderos para todos, le proponemos algunas normas básicas de la buena civilidad.
Según vanguardia, el comportamiento por lo común depende del medio de transporte, pero muchas sugerencias aplican a todos en general. Son las siguientes:
Haga el menor ruido posible: ponga su celular en silencio, hable quedito, use los auriculares y no saque la guitarra.
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No inicie conversaciones con desconocidos, y descártelo del todo si esa persona está leyendo o con los auriculares puestos. Si aun así le da por hablar, tenga en cuenta que los monosílabos como respuesta suelen significar que no quieren conversar con usted y no saben cómo decírselo. Pero si la otra persona se anima con la conversación, adelante: un buen tema puede hacer el viaje menos cansado y más agradable. Pero no le suban demasiado al tono de su conversación.
No se involucre en una plática de esas que no parecen tener final.
Si tiene que levantarse de su lugar, no se apoye ni se apalanque en el asiento de delante, porque lo va a mover y eso será molesto para la persona que viaja en ese lugar.
No pasa nada si se come unas galletas o un chocolate, siempre y cuando no haga ruido y limpie las migas al terminar.
Si va a subir comida, recuerde que en los vehículos mucha gente se marea, y que los olores que se quedan encerrados, pueden fastidiar a las personas sensibles. Que no sea por su culpa.
Los niños casi nunca dan problemas. Si el niño lleva su propio entretenimiento y se le presta un mínimo de atención, no molestará a nadie.
Si viaja solo y alguien le pide que le cambie el sitio para poder ir con un amigo o con un pariente, no sea rancio y dígale que sí. A no ser que tenga una razón de fuerza mayor o un problema de movilidad.
Hay que viajar bañado y con el desodorante puesto. No se corte las uñas mientras viaja. Tampoco se descalce (excepto en los trayectos largos, y si sus calcetines están recién lavados).