Telescopio Webb descubre posibles auroras en la enana marrón W1935
Los investigadores están desconcertados por las condiciones detrás de este fenómeno.
En un nuevo capítulo de noticias del espacio exterior, el telescopio espacial James Webb de la NASA, descubrió a través de sus impresionantes lentes, posibles auroras en la enana marrón W1935.
Esta enana más masiva que Júpiter pero más pequeña que una estrella, ha desconcertado a los investigadores y científicos de la NASA, debido a su falta de una estrella anfitriona y su baja temperatura.
Aunque se esperaba que un objeto como la enana marrón W1935, ubicada a 47 años luz de nuestro planeta y sin una fuente obvia de energía, no mostrara emisión de metano en su atmósfera superior, el equipo de astrónomos sugiere que este fenómeno podría estar vinculado a procesos generadores de auroras.
Destapando el misterio espacial
Para entender mejor este enigma, el equipo de investigación recurrió a nuestro propio sistema solar, destacando la relación entre la emisión de metano y el calentamiento de la atmósfera superior, un fenómeno común en gigantes gaseosos como Júpiter y Saturno, donde las auroras desempeñan un papel clave en este proceso.
Just because you’re cold and lack a star doesn’t mean you’re not capable of cool things! We're looking at you, W1935. #AAS243
— NASA (@NASA) January 10, 2024
A discovery using @NASAWebb has found a brown dwarf with infrared emission suggesting atmospheric heating by auroral processes: https://t.co/5fDMUMIZpl pic.twitter.com/B1SLpz1Snk
¿Cómo se originan las auroras en la Tierra?
En nuestro planeta, las auroras se originan cuando partículas cargadas energéticas emitidas por el Sol son atrapadas por el campo magnético terrestre.
Este fenómeno se despliega a medida que estas partículas colisionan con moléculas de gas en nuestra atmósfera, generando deslumbrantes cortinas de luz que parecen bailar en el cielo, especialmente cerca de los polos.
Júpiter y Saturno, experimentan procesos aurorales similares, influenciados tanto por la interacción con el viento solar como por las contribuciones de sus lunas activas, como Io para Júpiter y Encélado para Saturno.
El misterio de la enana marrón W1935 continúa
En el caso de enanas marrones aisladas como W1935, surge un enigma intrigante: la falta de un viento estelar que pueda contribuir al proceso auroral y explicar la energía adicional necesaria para la emisión de metano en la atmósfera superior es un misterio para los científicos.
Los investigadores suponen que procesos internos no identificados, análogos a los fenómenos atmosféricos observados en Júpiter y Saturno, o interacciones externas con el plasma interestelar o una luna activa cercana, podrían ofrecer una explicación a este fenómeno singular.
Preparan todo para el debút de la enana marrón W1935
El emocionante descubrimiento de la NASA será presentado en la 243 reunión de la Sociedad Astronómica Estadounidense en Nueva Orleans, donde los expertos compartirán más detalles sobre las implicaciones de este fenómeno.
Con información de la NASA
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